Vecinos aseguran que Ingeniero White se hunde y quieren ser indemnizados
19/04/2014 MUNICIPIOSVecinos se autoconvocaron para iniciar acciones por el hundimiento del suelo en varios sectores de la localidad portuaria, lo que generó rajaduras en cerca de 300 viviendas. Piden ser resarcidos por el municipio.
Unos 50 vecinos se reunieron ayer a la tarde en una vivienda de Ingeniero White para evaluar las acciones a seguir ante el hundimiento de suelo y las consecuentes rajaduras de unas 300 casas, problemas que se perciben en la localidad portuaria desde la década del `80.
La reunión fue organizada por Graciela Zubini, una vecina residente en Belgrano al 3200 que guarda documentación y recortes periodísticos de este diario y otros medios nacionales que datan desde 1982, y narran el problema que sufre ese sector de la localidad portuaria desde aquel entonces.
“Esto empezó por la rotura de la napa freática cuando se construyó la Central Termoeléctrica Luis Piedrabuena, que generó la formación de un canal que se llevó el agua hacia el mar. En la actualidad no sabemos si ocurre por las tareas de dragado, las actividades de la termoeléctrica o por las empresas del polo, pero lo cierto es que necesitamos una solución definitiva porque las casas se siguen rajando”, dijo Zubini.
En ese sentido denunció que en los últimos 32 años se destinaron desde el gobierno provincial y nacional mil millones de pesos para remediar los daños causados en unas 300 viviendas, aunque a pesar de esos cuantiosos recursos el problema nunca fue resuelto.
“Me llamaron concejales para prometerme que van a investigar esos datos, porque tengo cada uno de los decretos por medio de los cuales se envió dinero al municipio”, dijo.
Otras personas presentes en el encuentro especularon con que la comuna no actuó porque se pretende que la gente se vaya de la localidad.
“Nos vamos a tener que ir. Acá hay un proyecto inmobiliario o industrial, y yo creo que la segunda opción es la más viable” denunció Zubini.
Delia Mazzelo, domiciliada en San Martín al 3300, contó que en los últimos cinco años realizó diferentes mejoras en su vivienda, pero que solo sirven de parches.
“Estoy cansada de tapar con cinta de embalar las grietas que tengo en las paredes de mi habitación porque entra frío, quiero una solución duradera para mi familia”, dijo.
Similares fueron los reclamos de María del Carmen Suárez, residente en Plunkett 3600, quien contó que en 1982 su casa se partió al medio y aunque el arreglo que realizó el municipio sobrevivió a las últimas décadas, en el último año se volvieron a fisurar algunas paredes.
“Están como cuando el barro se seca y queda todo cortajeado y el cielorraso se inunda todo cada vez que llueve”, dijo.
Por último, sostuvieron que no se van a dar por vencidos en los reclamos y que pretenden una respuesta efectiva. “El próximo 27 de abril realizaremos una asamblea general y tendremos definiciones al respecto”, anunció Zubini.
Los vecinos creen que la solución es que les construyan las casas de nuevo o se los indemnice a valores de propiedades de Bahía Blanca para que quienes quieran mudarse lo puedan hacer.
Aseguran que el 80 por ciento de las viviendas de White tiene rajaduras. Algunas fueron adquiridas por el municipio y permanecen abandonadas y a cambio sus propietarios recibieron departamentos en el centro de nuestra ciudad.
“No vamos a soportar mas castigos, estamos cansados de que por el hundimiento del suelo se rompan las cloacas y las aguas servidas entren en nuestras casas, haya puertas que no cierran, ventanas en falsa escuadra, paredes con rajaduras de varios centímetros de profundidad. Y todo producto de la desidia gubernamental, no sólo del intendente actual, sino de los que estuvieron en los últimos 30 años”, Graciela Zubini.