Un pueblo completo quedó bajo el agua en Tucumán y toda su gente en la ruta

Los 4.500 pobladores de La Madrid debieron abandonar sus viviendas tras la crecida del río Marapa y la apertura de un dique en Catamarca

Los 4.500 pobladores de La Madrid debieron abandonar sus viviendas tras la crecida del río Marapa y la apertura de un dique en Catamarca

Más de 10 mil personas permanecen evacuadas en distintas provincias argentinas, en su mayoría en Tucumán, donde los habitantes de una localidad entera debieron dejar sus casas a raíz de las inundaciones generadas por el temporal que persiste desde el jueves.

Los pronósticos meteorológicos no son alentadores ya que se espera «un nuevo período de mal tiempo en la mayor parte del país».

En Tucumán, donde hasta anoche había 6.000 evacuados, la situación más crítica se registró en La Madrid, una comuna del sur provincial en la que viven 4.500 personas y donde, según el secretario general de la Gobernación, Pablo Yedlin, «el 100 por ciento de la población fue evacuada» luego de que el río Marapa inundara el casco urbano.

El funcionario consideró «desesperante» la situación, precisó que «hay 700 evacuados en escuelas y otros 5.000 en la ruta 157» y agregó que en la ciudad de Graneros «tenemos el 30 por ciento de la población evacuada».

El comisionado comunal de La Madrid, Dardo Herrera, aseveró que «cuando las aguas se vayan tenemos que reconstruir la ciudad prácticamente desde cero». Se calcula que al menos son 300 las casas dañadas, algunas con más de dos metros de agua en su interior.

El gobierno provincial habilitó centros de evacuados en las ciudades de Simoca y Taco Ralo, adonde se trasladó una parte de los pobladores de La Madrid, aunque muchos decidieron permanecer a la vera de la ruta nacional 157, donde eran auxiliados por Gendarmería y personal del Estado tucumano.

La crecida del río Marapa se agravó el fin de semana por las lluvias en la zona y en la vecina provincia de Catamarca, situación que obligó a abrir las compuertas del dique Escaba.

Esto generó la inundación de La Madrid y de otros pueblos distantes entre 80 y 100 kilómetros al sur de esta capital. En La Madrid Defensa Civil trabajaba con botes debido a que en grandes sectores, por la altura del agua, no se podía ingresar con vehículos.

El secretario general de la Gobernación, Pablo Yedlin, dijo que «la gente perdió todo, son cifras millonarias».

Vialidad Provincial debió romper un tramo de la ruta nacional 157 para facilitar el escurrimiento de las aguas hacia el dique Frontal de Termas de Río Hondo y aliviar de este modo la crítica situación.

Además, el organismo provincial anunció que estaba interrumpido también el tránsito en las rutas 334, 331 y 323, mientras la nacional 38 rumbo a Catamarca estaba habilitada parcialmente.

En tanto, hubo un derrumbe en la ruta 307, que une la capital tucumana con los Valles Calchaquíes, en el este de esta provincia, un sector que estaba afectado por la crecida de otros ríos y ya no del Marapa.

Al menos 300 casas fueron dañadas por las aguas que ingresaron a las viviendas y que en algunos casos alcanza los dos metros de altura.

«Tendremos que reconstruir La Madrid», manifestó Herrera quien indicó que «lamentablemente fuimos golpeados una vez más por este fenómeno climático como sucedió en años anteriores».

Según Herrera, «no hay un lugar donde poner un dedo que no esté inundado» y reiteró que «tampoco existen antecedentes de haber vivido algo así en la historia de La Madrid, pese a que este fenómeno de la naturaleza ya se repitió anteriormente en varias ocasiones».

Herrera indicó que desde la semana pasada vienen sufriendo inundaciones en la zona rural de la localidad donde vive el 40 por ciento de la población total, que es de unos 8.000 habitantes, pero todo empeoró cuando el agua llegó a la zona urbana.

«Esta situación no es nueva para nosotros, ya nos había pasado en 1992, en 1998, en 2000, y ahora de nuevo», relató Gladys Brito, una de las personas evacuadas.

En Comodoro Rivadavia

En la otra punta del país, en la ciudad chubutense de Comodoro Rivadavia las autoridades dijeron que quedó «devastada» al punto que después del temporal del miércoles todavía 1.300 personas siguen sin poder regresar a sus casas.

Si bien en la Patagonia las últimas lluvias fueron leves, los vecinos denunciaron que recibían en sus casas agua turbia por problemas en la distribución del servicio, por lo que las autoridades recomendaron no usarla para ingerir y en todo caso agregarle lavandina para potabilizarla.

El hospital Regional de Comodoro Rivadavia trabaja en un «alerta» epidemiológico ante la posibilidad de que tras el temporal surjan casos de «diarreas y enfermedades respiratorias» generalizados, dijo la jefa de pediatría, Mara Márquez.

El ministro del Interior de la Nación, Rogelio Frigerio, visitará hoy Comodoro Rivadavia junto al gobernador Mario Das Neves.

Fuente: la Capital Rosario