El Vaticano crea una red mundial de lucha «contra la corrupción»
En este escenario, estudiará la excomunión para mafiosos porque "la corrupción, antes de ser un acto es una condición".
04/08/2017 EL MUNDOEn este escenario, estudiará la excomunión para mafiosos porque «la corrupción, antes de ser un acto es una condición».
El Vaticano creará una red mundial de lucha contra la corrupción y busca cooperar con la aplicación de tratados para desarticular las redes criminales que trascienden las fronteras de los Estados.
En este escenario, estudiará la excomunión para mafiosos porque «la corrupción, antes de ser un acto es una condición».
La Santa Sede, de acuerdo con los llamados del Papa Francisco y tras el congreso desarrollado en el Vaticano el 15 de junio pasado, dará pleno impulso a la lucha contra la mafia y la corrupción con una «red global» para enfrentar a estos flagelos.
En esa reunión «surgió la voluntad de formar un frente común contra las diversas formas de corrupción, crimen organizado y mafia», anunció el dicasterio vaticano para el Desarrollo Humano Integral, con «una red a nivel internacional», informó el sitio Caminos Religiosos.
«La Iglesia en el mundo ya es una red y por esto puede y debe ponerse al servicio de esta intención con valentía, decisión, transparencia, espíritu de colaboración y creatividad», aseguraron los eclesiásticos en el Vaticano.
En tanto, se «profundizará el estudio sobre una respuesta global, a través de las Conferencias Episcopales y las iglesias locales, sobre la excomunión para mafiosos y organizaciones criminales afines y la perspectiva de excomunión por corrupción».
El debate es impulsado por el dicasterio presidido por el cardenal ghanés Peter Turkson, quien publicó el libro «Corrosión» sobre el tema. Se realizará una Consulta Internacional sobre la Justicia, con claros objetivos detallados que «no se reducirá a exhortaciones piadosas, porque hacen falta gestos concretos. El compromiso educativo exige maestros creíbles, también en la Iglesia».
Respecto a la excomunión de mafiosos y corruptos, se reconoce que «este camino no será simple: la Iglesia está difundida en el mundo y hace falta escuchar a todas sus articulaciones para proceder en el diálogo también con los no cristianos, de manera participativa, transparente y eficaz», se dijo.
La Consulta manifestó que la corrupción «causa también la falta de paz» y su llamado apeló a «un despertar de las conciencias», con eje en «tres niveles de acción: la educación, la cultura y la ciudadanía, contra toda forma de indiferencia».