El Intendente de Santa Fe abandonó enojado un acto de la provincia en un barrio de Santa Fe

El intendente capitalino no quiso escuchar el discurso de su rival político Emilio Jatón durante el anuncio de obras para un nuevo centro de salud

El intendente capitalino no quiso escuchar el discurso de su rival político Emilio Jatón durante el anuncio de obras para un nuevo centro de salud

El intendente de Santa Fe y titular nacional de la UCR, José Corral, abandonó intempestivamente ayer un acto que llevaba adelante la provincia, en barrio capitalino de Chalet. Fue un gesto inusitado ya que trataba de un acto protocolar, de apertura de ofertas en el marco de la licitación para la construcción de un centro de salud. El gesto tuvo que ver con la tensa relación entre el socialismo y el radicalismo, encabalgado este último en dos frentes políticos antagónicos: el Progresista y Cambiemos.En medio de la ceremonia, Corral —sentado junto al diputado Paco Garibaldi, en la primera fila del público—, se levantó y se fue en el mismo momento en que tomó la palabra el senador por el departamento La Capital, Emilio Jatón, quien es candidato a concejal por el Frente Progresista, duro rival del candidato de Cambiemos.

Consultado por LaCapital sobre su inexplicable actitud, el intendente señaló que con el gobernador Miguel Lifschitz «sigue teniendo una relación óptima», y que incluso se juntarán en breve en un encuentro ya programado para avanzar en cuestiones de gestión conjunta.

Por su parte, el ministro de Gobierno, Pablo Farías, puso su mejor cara de ministro político para sorprenderse afirmando que él no se dio cuenta de que el intendente se había enojado y abandonado el acto donde anunciaban la construcción de un nuevo edificio para el centro de salud en esa barriada al oeste de cancha de Colón. Para Farías, Corral se fue porque tenía otras cuestiones de agenda.

Es que el clima político pre y post Paso en la capital provincial es más picante que otros lados. En mayo pasado funcionarios provinciales, Lifschitz incluido, fueron a inaugurar unas luminarias de una avenida de la ciudad que no encendieron. Y como había que prenderlas desde alguna repartición municipal se instaló la sospecha definitiva de que se trató de una picardía electoralista, más allá de cualquier desmentido posterior.

Ayer fue diferente. A Corral lo habían sentado en la primera fila del público. No lo hicieron subir al estrado de autoridades en el que estaban Farías, Jatón y gente del centro de salud. Cuando le dieron la palabra Jatón, el intendente se levantó y salió. Todos los presentes creyeron ver una ofuscada retirada. Pero las dudas las intentó disipar el propio Corral en su cuenta de twitter: «Supervisando la obra del viaducto Chalet-Centenario. Mucho más productivo que escuchar el discurso del candidato socialista @emiliojaton», escribió a los pocos minutos de haberse ido del acto.

Hasta la noche el intendente decidió sacarle el máximo jugo al desplante «de convertir un acto institucional en una actividad proselitista más de la campaña» y de haberlo sentado entre el público por más que él no tenga «problemas con las cuestiones de protocolo». Eso sí, cuando en un momento «le dieron la palabra al candidato a concejal del socialismo, que no tuvo ninguna intervención en la gestión ni en el proyecto, ni siquiera en el diálogo con la gente del centro de salud con la que nosotros hablamos, decidí que era más interesante ir a ver cómo marcha la obra del viaducto que va a permitir el cruce seguro entre Chalet y Centenario, que está a pocos metros de ahí», ironizó.

Tras el episodio, Farías fue consultado sobre si los esperan años difíciles entre la Casa Gris y el intendente. «Creo que no —respondió—; seguro vamos a poder encontrar, como hicimos siempre, son canales de entendimiento y diálogo, de búsquedas de consenso».

Fuente: La Capital Rosario