Casi 22 mil Formoseños a la espera del agua por red en sus hogares

Aguas de Formosa y el municipio amplían la red en la ciudad

Aguas de Formosa y el municipio amplían la red en la ciudad

Que el agua es un vital líquido no es nuevo. Que hay países donde por ejemplo sale más caro comprarse una botella de agua mineral que el litro del combustible tampoco, vea el ejemplo de Venezuela. No obstante, y a pesar de los tiempos que vivimos, según el último censo que se realizó en Argentina, en Formosa en el 2010 había un 9,64% de personas sin acceso al agua de red , aunque si este dato lo contrastamos con los índices de NBI, donde naturalmente, el no contar con acceso al agua de red debería de ser una necesidad básica insatisfecha, el número trepó en ese mismo periodo de año a 28,8%.

Es decir que de un total de 234,354 habitantes solo de la ciudad de Formosa, según el último censo realizado en el 2010, unos 21,091 formoseños no cuentan con acceso al agua de red en sus hogares, en pleno siglo XXI y en una provincia que se jacta de querer ser vanguardista, hay gente que hace fila para comprar una garrafa de 10 kilos y hay familias que no tienen agua de red en sus casas.

Pero hay que ser optimistas, o mirar el vaso medio lleno, desde luego que todo mejora si el parámetro de comparación es el 2001. En ese año, fatídico para todos los argentinos, en nuestra ciudad capital, había un 24,9% de personas sin contar con el acceso al agua de red en sus casas. Y en cuanto a las NBI, la cosa cambia, porque en el 2001 el porcentaje de personas con Necesidades Básicas Insatisfechas era de 27%, y en el 2010 creció hasta casi el 30%, un 28,8.

Qué hace que tantas familias sigan padeciendo males del siglo pasado. Se instalará una fábrica de dióxido de uranio y un polo científico nuclear en nuestra ciudad pero no hay respuestas para estas casi 22,000 personas que no cuentan con lo más básico que garantiza una vida digna, el agua.

Sin mencionar a quienes tienen sus NBI, es decir, viviendas precarias, no contar con baño o tenerlos pero en forma deficitaria.

Muchos dicen que después del petróleo, la segunda causa de las grandes guerras en el mundo será por el agua. Para estas personas que no tienen acceso a este elemento vital, hace tiempo que comenzó su lucha.

Pero no nos quedemos con los números fríos, parafraseando lo escrito por el filósofo José Pablo Feinmann, “los números tapan a las personas”, las cifras esconden la lucha diaria de estos miles de conciudadanos que día a día tienen que ingeniárselas para poder conseguir algo que para muchos de nosotros, como ser, abrir una canilla y tener agua limpia y cristalina.

Fuente: El Comercial