Con la mirada puesta afuera

Mientras avanza el ajuste y la represión hacia adentro, el Presidente encabezó un acto donde consideró que el país “inspira confianza” en el exterior.

Mientras avanza el ajuste y la represión hacia adentro, el Presidente encabezó un acto donde consideró que el país “inspira confianza” en el exterior. Calificó la jornada como “histórica” pero suspendió su agenda por el anuncio del submarino San Juan.

Mientras puertas adentro de la Argentina avanza con una serie de reformas para bajar las jubilaciones, recortar los derechos de los trabajadores y profundizar el ajuste, Mauricio Macri asumió ayer la presidencia pro témpore del G20 con una gran proclama contra la pobreza. Durante un acto realizado en el Centro Cultural Kirchner, el Presidente dijo que su “gran meta” en la Argentina es “reducir la pobreza” y que ese eje guiará su trabajo al frente del grupo que reúne a las potencias mundiales. Poco más tarde, calificó desde su cuenta de Twitter como la jornada de ayer como un “día histórico”. No se refería al anuncio de la Armada argentina de dar por terminada la búsqueda del submarino ARA San Juan y sus 44 tripulantes. Después del anuncio, la Casa Rosada anunció que suspendía la actividad oficial prevista para hoy.

A menos de 24 horas de la media sanción de la reforma previsional y la ley Responsabildad Fiscal y el Consenso Fiscal, Macri se encabezó la ceremonia en el CCK donde estuvieron gobernadores, ministros, miembros de la Corte Suprema, legisladores, embajadores de los países miembros del G20 e integrantes de las organizaciones internacionales que participan del foro. “Le inspiramos confianza al mundo porque ven que estamos por el camino correcto”, afirmó el jefe del Estado durante su discurso, donde habló también de la “identidad plural”, la “diversidad” y la “tradición de paz y convivencia pacífica”. No parecía estar al tanto todavía de la fuerte represión a empleados estatales que ocurrió ayer en Neuquén, ni recordar el asesinato del joven Rafael Nahuel durante un operativo de las fuerzas de seguridad federales el sábado pasado. “Nuestro lenguaje es el de la justicia y el consenso. Nuestra diplomacia se basa en el poder de la norma, no la norma del poder”, remarcó.

Mientras tanto, en la Patagonia, cerca de donde ocurrieron los hechos de violencia estatal, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne y el titular del Banco Central, Federico Sturzenegger, recibieron a los ministros del G20 en la ceremonia inicial y mañana y pasado tendrán reuniones técnicas. Será el primer encuentro preparatorio de la agenda de temas que serán analizados durante la presidencia argentina. Durante la mañana, Dujovne anticipó que uno de los objetivos será “continuar desmantelando los esquemas de protección que aún rigen para los productos que exporta el país”.

La asunción de Macri al frente del G20 marca el comienzo de un período que tendrá su punto saliente en noviembre del año que viene, mes en el que Buenos Aires será escenario de la cumbre de presidentes de los países que integran el grupo. Durante su exposición, Macri anunció los tres ejes de trabajo que impulsará el país frente a las principales potencias económicas que integran el grupo serán “el futuro del trabajo, infraestructura para el desarrollo y el futuro alimentario”. El año pasado, Alemania estuvo al frente del foro y en la última reunión celebrada de Hamburgo, manifestantes colgaron una bandera con la leyenda: “Presidente Macri, no venda nuestra Argentina”. Ayer, para evitar cualquier incidente, se realizó un importante operativo de seguridad en el bajo porteño, que incluyó cortes de calle, el desvío del Metrobus y el cierre de la cabecera del subte B, en Leandro N. Alem.

Fuente: Página 12