Suárez: el gremio municipal acató la conciliación, pero reiteró que va por una suba del 15%
Hoy se normalizó la prestación de servicios en el municipio.
Hoy se normalizó la prestación de servicios en el municipio.
El Sindicato de Trabajadores Municipales de Coronel Suárez acató la conciliación obligatoria dispuesta por el ministerio de Trabajo bonaerense, pero anticipó que pedirá un aumento salarial no menor al 10% para arrancar 2018.
En el día de hoy los trabajadores municipales volvieron a realizar sus tareas habituales y permanentes, aunque el gremio alertó que el malestar persiste porque el conflicto salarial aún no se soluciona.
“Se normalizaron hoy todos los servicios, no estamos en asambleas y los trabajadores volvieron a la normalidad, pero el conflicto no se ha solucionado y la necesidad de la gente no fue atendida”, enfatizó Rubén Allende, secretario general del STM.
El dirigente dijo que el gremio irá a la nueva audiencia de conciliación, este viernes, para reiterar su reclamo de un 15% de aumento para este mes, aunque reconoció que, si el Ejecutivo sigue sin contemplarlo, hay un plan b.
“Este conflicto que no le hace bien ni al Ejecutivo, ni al gremio, ni a los trabajadores ni a la comunidad. No sabemos cuál es el límite del Ejecutivo en cuanto a una nueva oferta, pero nosotros queremos un 15% a diciembre; y, si nos dan un 5%, queremos por lo menos un 10% a enero del 2018”, explicó.
También dijo que esperan que no se descuenten los días no trabajados por el conflicto.
“Ya demostramos al ministerio de Trabajo que la voluntad del gremio está, y que lo que queremos por parte del Ejecutivo una oferta superadora”, dijo.
La propuesta del Ejecutivo era un 5% de aumento para este mes y una serie de recategorizaciones, más un porcentaje similar a partir de enero.
Para Allende, el principal problema del año fueron los aumentos en las tarifas que “rompieron el bolsillo de los trabajadores”.
“Ese 5% ofrecido para el segundo semestre es muy poco. Pedimos la equiparación (del salario básico) con el salario mínimo, vital y móvil, que aun así está por debajo de la línea de pobreza. No pedimos exageraciones, sino el derecho a vivir dignamente”, remarcó.
“El sueldo del trabajador se aleja cada vez más de la canasta familiar y el Ejecutivo debe estar a la altura de las circunstancias”, añadió.
