Una escuela quiaqueña ya cuenta con gas natural
EN ESTE LUGAR SE COCINA PARA MÁS DE SETECIENTOS NIÑOS A DIARIO
Luego de intensas gestiones, la “General Belgrano” es la primera en contar con el servicio en toda la Puna jujeña.
El tan anunciado progreso del Gasoducto “Néstor Kirchner”, con pasos lentos pero seguros, comienza a avizorar sus primeros frutos para los poblados puneños, desde su inauguración allá por marzo del 2012, en el caso de los habitantes quiaqueños.
La Escuela de Frontera 1 “General Belgrano” de esta localidad se convirtió en el primer establecimiento fronterizo en contar con gas natural. Largo pedido anhelado por toda esa numerosa comunidad educativa. Si bien no hubo un acto protocolar para anunciar la importante novedad, es meritorio reconocer el esfuerzo del Ministerio de Educación y el Gobierno provincial.
Remontando a la historia, cuando La Quiaca era un pueblo recién fundado y sus habitantes tenían fuertes deseos de progreso, nació el edificio escolar, gracias a vecinos destacados que gestionaron la instalación del establecimiento allá por el año 1909.
Ciento cinco años después que las paredes de piedra, pisos de madera y techos altos fueran testigos silenciosos de tanta historia, incluso el arribo del primer tren y la época en que se fue para no volver, se concretó este servicio.
En marzo de 1972, por Ley 19.524, el establecimiento educativo pasó a tener modalidad de “jornada completa”. Un año después comenzó a funcionar el servicio de comedor escolar, que desde ese entonces atiende la demanda nutricional de centenares de niños que viven en la ciudad y en Villazón (Bolivia).
Los tiempos demandaron que desde hace varios años atrás haya una mejor atención hacia el estudiantado. Un sector fundamental es la cocina, para la que hubo largas gestiones con el fin de equiparla con los utensilios necesarios. La incansable lucha de padres, docentes, hasta incluso alumnos que más de una vez contribuyeron con el establecimiento, hicieron posible que cuenten actualmente con tan elemental y necesario fluido.
En tal sentido el vicedirector del establecimiento, René Gaspar, dijo a El Tribuno de Jujuy que “para nosotros, como habitantes de una ciudad fronteriza que está muy distante con otras grandes ciudades, es muy significativo poder contar con gas natural. Las gestiones fueron constantes, realizando viajes hacia la capital provincial, muchas veces sin saber cuándo nos reintegraban el dinero para comprar gas envasado, incluso los padres abonaban por su propia voluntad un monto y poder adquirir garrafas”, sostuvo. Al tiempo que añadió: “no tenemos nada más que palabras de agradecimiento a la arquitecta Rosa Pedetti del Ministerio de Educación, quien fue la impulsora del proyecto”, dijo.
Además dejó sentado que “antes el servicio del comedor se interrumpía a veces por no contar con los fondos para comprar gas”.
Y con entusiasmo agregó que “ahora también hay agua caliente, por lo tanto podemos afirmar que pensamos con una visión a futuro y progreso, no solo para la institución sino de todo el pueblo”.
Hablar de números cuando se realizan este tipo de acciones es innecesario, pero cabe mencionar que la obra consistió en toda la conexión de cañerías. La escuela ahora cuenta con anafes nuevos, ya que se cambiaron las “viejas” cocinas que quedaron en desuso.
Por otra parte la nueva directora Rosaura Vilte ordenó pintar con fondos de cooperadora la cocina y comedor, donde desayunan y almuerzan 700 escolares, desde el nivel inicial hasta séptimo grado, en dos turnos, porque no puede servirse a todos juntos.
Asimismo los directivos tienen previsto instalar un horno, aprovechando los beneficios y bajo costo del gas natural que hoy es una realidad en la Puna.
