En Caleta el SOEMCO amenazó con embargar las cuentas municipales

En la asamblea de afiliados realizada ayer en el complejo deportivo, el secretario general del SOEMCO, Julián Carrizo, pidió al intendente Córdoba “que se baje del caballo” y deje de lado la soberbia.

En la asamblea de afiliados realizada ayer en el complejo deportivo, el secretario general del SOEMCO, Julián Carrizo, pidió al intendente Córdoba “que se baje del caballo” y deje de lado la soberbia.

Las relaciones laborales e institucionales entre la gestión del intendente José Córdoba y el Sindicato de Obreros y Empleados de Caleta Olivia están totalmente quebradas y por ahora no tienen visos de restauración. Ayer, una nueva asamblea de afiliados decidió avalar la postura de comisión directiva y cuerpo de delegados, rechazando la conciliación obligatoria impuesta por el Ministerio de Trabajo de la Nación.

El paro por tiempo indeterminado que inició ayer el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales de Caleta Olivia (SOEMCO) se mantiene vigente. Pero además, el gremio redobló su apuesta amenazando con trabajar las cuentas de municipio por un monto de alrededor de 6.000.000 de pesos que se le adeuda en concepto de aportes de afiliados, un reclamo sostenido por un juicio que le fue favorable.

Por otro lado, no se descarta que a partir de lunes se sume un agravante al conflicto ya que existe la posibilidad de un corte de ruta. De concretarse esa medida, la situación se remontaría a lo sucedido en 2005 cuando se produjo la huelga más extensa en este ámbito, la cual duró 72 días.

El nuevo conflicto se desató también por demanda de un incremento salarial. El gremio exige un 40% para el primer semestre del año y el intendente solo otorgó un 27% en dos etapas.

Por ello, hace pocas semanas se iniciaron los paros escalonados de 48, 72 y 96 horas, hasta adoptarse una medida de fuerza por tiempo indeterminado que tendría un acatamiento del 95%, según el gremio.

Los municipales activos son aproximadamente 3.500, pero ayer sólo acudieron menos de mil a la asamblea que se realizó por la mañana en el complejo deportivo “Ingeniero Knudsen”.

La ausencia de los restantes tiene varias lecturas: que muchos no fueron por comodidad, que otros no lo hicieron porque no están totalmente de acuerdo y que no son pocos los que solo marcan tarjeta y no se les conoce función específica.

EMBARGO Y DESAFIO

La asamblea también con la participación de concejales que están enfrentados con Córdoba, los radicales Juan Acuña Kunz y Víctor Chamorro, además del kirchnerista Manuel Aybar.

También estuvo presente uno de los asesores letrados del gremio, Ricardo Díaz, quien al hacer uso de la palabra manifestó que tiene la orden de ejecutar la sentencia de la justicia a favor de la entidad por los fondos que le adeuda el Departamento Ejecutivo Municipal.

Antes había hecho uso de la palabra el secretario general Julián Carrizo, quien en principio fundamentó las razones por las cuales no se acató la conciliación del Ministerio de Trabajo de la Nación.

En ese sentido, reiteró que la intervención de ese organismo es inconstitucional porque no puede interceder en un conflicto laboral que es competencia de una órbita provincial, es decir que debería haber actuado la Secretaría de Trabajo de Santa Cruz.

El dirigente también indicó que el embargo implicaría que 16 de los nuevos vehículos que adquirió el municipio pueden pasar a ser patrimonio del gremio.

Además, profirió fuertes y desafiantes acusaciones al intendente Córdoba, pidiéndole a los gritos “que se baje de caballo” y deje de lado la soberbia.

Luego, a modo de advertencia personal y dirigiéndose a los afiliados, dijo que “podrá voltearme a mí, pero a todos ustedes no va a poder voltearlos”, expresión que generó aplausos y gritos de aprobación.

Por otro lado hizo un llamado de atención a los trabajadores que no estuvieron en la asamblea o aún no acataron el paro, diciéndoles que si ahora se arrodillan y no luchan por sus derechos, ese podrá ser el futuro de sus hijos.

Fuente: El Patagónico