Dos presidentes que piensan muy parecido

El presidente argentino y el chileno son amigos desde sus épocas de empresarios millonarios. Ayer anunciaron un acuerdo comercial y prometieron más integración comercial. Insistieron en sus críticas a Venezuela.

El presidente argentino y el chileno son amigos desde sus épocas de empresarios millonarios. Ayer anunciaron un acuerdo comercial y prometieron más integración comercial. Insistieron en sus críticas a Venezuela.

Se encontraron como los viejos amigos multimillonarios que son. El presidente Mauricio Macri recibió a su par chileno Sebastián Piñera, por el que llegó a hacer campaña. Ambos anunciaron un acuerdo comercial entre los países que será enviado en dos semanas a los respectivos congresos. “Me alegra que compartamos la visión, ideales, además de la historia, sabiendo que somos socios del siglo XXI y que compartimos esos valores e intereses. Y que frente a los desafíos que nos plantea el mundo integrarnos como nunca antes nos va a facilitar al desarrollo que tiene que ser una meta para ambos y claramente a reducir la pobreza”, sostuvo Macri, quien habló de un “continuo crecimiento” de ambos países. Por lo menos no dijo invisible.

Piñera fue recibido por Macri en su primera visita al país: lo agasajó en una cena en la Quinta de Olivos en las que estuvieron también sus respectivas esposas. Tras un encuentro bilateral en el despacho presidencial, compartieron una declaración conjunta en la que dejaron clara la sintonía de derecha: hubo alusiones a las oportunidades de negocios y condenas a Venezuela, todo por igual.

“Compartimos con Argentina valores y visiones, como el valor de la democracia, de la libertad, el respeto a los derechos humanos y el estado de derecho, y también visiones sobre cómo enfrentamos los problemas, las oportunidades y los desafíos del futuro”, sostuvo Piñera, en un encuentro repleto de sonrisas del millón. Macri y Piñera anunciaron que enviarán a los congresos de sus países un acuerdo comercial que “facilite y acelere el comercio, el desarrollo productivo, la generación de empleo y que, junto a la educación, sea la mejor herramienta para reducir la pobreza”. Es el acuerdo que el Gobierno saliente de Michelle Bachelet rubricó con Macri a través de sus respectivos cancilleres.

Piñera indicó que buscarán “unificar y hacer eficientes” las aduanas de ambos países y, del mismo modo, “fortalecer nuestra infraestructura con los pasos fronterizos y los corredores bioceánicos, que nos va a permitir integrarnos más y mejor”. Indicó que eso será de gran utilidad para el transporte proveniente de Brasil y Paraguay y la cooperación en materia de intereses en el Continente Antártico.

Según la Cancillería argentina, ese acuerdo generará “nuevas oportunidades en distintos sectores proveedores de servicios, así como para el comercio electrónico y la promoción de la agenda monoambiental, laboral y de género en el comercio bilateral, pilares del desarrollo sostenible e incluyente”.

“Integrarnos como nunca antes nos va a facilitar al desarrollo que tiene que ser una meta para ambos”, sostuvo Macri.

Macri llevó más allá los alcances de los acuerdos. Propuso que, además del comercial que firmaron, espera avanzar en acciones conjuntas que permitan combatir juntos “las agresiones que recibimos del crimen organizado y el narcotráfico”, y reforzar la cyberseguridad.

El presidente argentino insistió en que “lo que está pasando en Venezuela llegue a su fin, restableciendo un gobierno democrático, con unas elecciones transparentes”, sostuvo, desconociendo así las elecciones que convocó el gobierno de Nicolás Maduro y, de paso, también los comicios en los que fue electo.

“Espero que esto que comenzamos sea el principio de algo verdaderamente histórico en la integración de Argentina-Chile y Chile-Argentina”, dijo el presidente anfitrión. Macri también aprovechó la oportunidad para avanzar en su viejo sueño de ir hacia un acuerdo que termine con un tratado de libre comercio con Estados Unidos: “Es una oportunidad para avanzar en estrechar esfuerzos entre la Alianza del Pacífico y el Mercosur, cuyos integrantes tienen vocación para avanzar en este tipo de conversaciones”, sostuvo. La idea siempre fue pasar de esto al Acuerdo Transpacífico con Estados Unidos, pero la presidencia de Donald Trump parece, de momento, haber detenido esos planes. Aunque no para siempre.

Fuente: Página 12