Temen que la licitación para restaurar el Monumento quede a mitad de camino
La puesta en valor no estará concluida en septiembre, plazo establecido por el pliego, que se cree "de imposible cumplimiento".
18/06/2018 POLÍTICALa puesta en valor no estará concluida en septiembre, plazo establecido por el pliego, que se cree «de imposible cumplimiento».
A dos días del Día de la Bandera, las obras de puesta en valor del Monumento siguen inconclusas, defectuosas y con una licitación que podría caerse. Primero se admitió que los trabajos no finalizarán acorde a los plazos de licitación, que vencen en septiembre. Ahora, el temor es que la obra directamente no se termine. Al retaceo de fondos que debe proveer Nación, ahora se estima que el pliego imponía obligaciones técnicas «de imposible cumplimiento». «Es el símbolo de la ciudad y sin embargo está peor que antes. Saldo el hidrolavado en la torre, tengo la impresión que Nación no quiere terminarla», esgrimió el concejal progresista Pablo Javkin.La restauración comenzó en febrero del año pasado y preveía un plazo de 18 meses, por lo que debería estar lista en septiembre. Sin embargo, apenas se ejecutó el 29 por ciento de la obra.
La adjudicación fue el desembarco del primo del presidente en Rosario. Angelo Calcaterra había comandado Crearuban SA en un paquete de empresas hasta que se la vendió al grupo Pampa Energía, que integró un paquete de firmas por afuera del rubro hidrocarburos.
A valores del año pasado, el presupuesto de adjudicación rondaba los 147 millones de pesos, de los que Creaurban se hizo de unos 31 millones. Y desde comienzos de 2018 los fondos empezaron a llegar a cuentagotas.
La restauración, tal como lo requerían los pliegos demandaba una obra de «artesanía». Para paliar las filtraciones y problemas de humedad, se impuso que primero se quiten las placas de mármol travertino y luego se hagan tareas de impermeabilización y un sellado correcto de las fisuras.
Una vez concretada la tarea de frenar el avance de la humedad comenzaría la puesta en valor propiamente dicha. Todo este proceso iba a demandar hasta septiembre próximo, pero nadie se anima a asegurar que se llegará en tiempo y forma.
Ahora, la discusión en los pasillos de los funcionarios es por el cese del contrato. «El pliego impone características técnicas de imposible cumplimiento: relevar placas, reemplazar las que estén partidas o rotas e impermeabilizar», dijo un entendido quien remitió parte de las dificultades a las tareas de refacción que se hicieron en la década del 80.
La fiscalización de las etapas de la obra tiene responsabilidad compartida. El municipio asumió el compromiso de inspeccionar a Creaurban, mientras que el Ministerio de Cultura (Comisión Nacional de Monumentos) y Obras Públicas deben supervisar las etapas.
Una fuente calificada cuestionó el retiro del andamio «que es lo más caro y lo que más tiempo lleva (4 meses) y sin terminar la obra. ¿Dónde esta el diagnóstico?», se preguntó.
Por unanimidad.
En tanto, la restauración del Monumento a la Bandera se instaló en el Concejo Municipal. Hace diez días, el concejal progresista Pablo Javkin ingresó un pedido de informes en el que solicita a la Intendencia que gestione ante el gobierno nacional la respuesta de un pliego de preguntas en relación a la calidad de la reconstrucción y a los plazos a cargo de la contratista Creaurban.
El pedido fue aprobado el jueves pasado en la sesión ordinaria del Palacio Vasallo, con algún agregado en la redacción introducido por Cambiemos.
Javkin le encomendó a la administración de Mónica Fein que conteste «a través de la repartición que corresponda» y gestione ante Nación si existe alguna «modificación o ampliación» de los plazos originalmente previstos.
A su vez, solicitó que se informe el porcentaje de avance de la obra, actualización de los montos y pago de certificados de obras ya aprobados.
En cuanto al pliego en sus especificaciones técnicas, el ex secretario General del municipio quiere saber sobre la remoción y registro de placas con fisuras mayores a los 3 milímetros, la utilización de herramientas adecuadas para la realización de las obras, las razones que explican los daños en placas readheridas, el registro de piezas deterioradas, rotas o con faltante de partes, trabajos de impermeabilización y el tipo de mezcla usada en la adhesión de piezas, entre otras.
Javkin pidió conocer además el nivel de capacitación y cantidad de operarios especialistas en marmolería que se encuentran afectados.