Inquilinos neuquinos se quejan por la suba del 60% en el alquiler
Es la respuesta del mercado inmobiliario a la corrida y la inflación.
18/09/2018 ECONOMÍAEs la respuesta del mercado inmobiliario a la corrida y la inflación.
Las renovaciones de los alquileres aumentaron hasta un 60 por ciento, como efecto de la escalada del dólar, describió la presidenta de la Unión de Inquilinos Neuquinos (UIN), Pamela Gaita, a este diario. Como resultado, aseguró, hay incertidumbre en el mercado inmobiliario, por lo que los propietarios de los inmuebles ya comenzaron a hacer contratos por seis meses o un año, modalidades contrarias a las fijadas por el Código Civil.
La organización recibió muchas consultas en los últimos días referidas a este tema, lo que despertó preocupación y reflotó el pedido para que el Estado regule la actividad. Gaita dijo que esto tiene un fuerte impacto en el bolsillo de los trabajadores.
Agregó que los inquilinos se ven perjudicados por la inclemencia del mercado. “Las renovaciones aumentaron entre un 40 y un 60 por ciento”, detalló. En este 2018 ya tuvieron un crecimiento de alrededor del 50 por ciento.
El presidente del Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de la ciudad, Nicolás Fundaró, aseguró que no hay un porcentaje definido para las renovaciones y consideró que la cifra que arrojó Gaita es elevada (ver aparte).
Para la ley, cuando el contrato caduca se terminan las responsabilidades de las partes, por lo que los inmobiliarios no lo toman como un aumento, sino como un nuevo acuerdo. Para el bolsillo de los inquilinos, la nueva relación contractual representa un aumento.
En otro orden, Gaita reveló que también aumentaron las expensas, hasta unos cinco mil pesos en promedio en viviendas de la ciudad. Si bien existe una amplia oferta de precios de alquileres, lo cierto es que muchas veces los gastos comunes pueden engrosar las cuentas mensuales considerablemente.
Los datos que maneja la Unión de Inquilinos Neuquinos indican que la gente prioriza pagar el alquiler por sobre otros consumos fijos. Es por eso que, ante una suba desmedida, se ajusta. “La gente tiene que vivir en algún lado y no da el brazo a torcer, pero no sirve si eso implica que baje su calidad de vida”, sentenció.
El Colegio de Martilleros y la UIN coincidieron en que las actualizaciones de precios andan en el orden del 15 por ciento semestrales y del 35 por ciento anuales.
Algunos propietarios particulares se aprovechan de estas situaciones para sacar el máximo provecho, con contratos por seis meses o un año, una modalidad que no está permitido por el Código Civil, que establece que los alquileres de uso habitacional tienen un plazo mínimo de dos años.
Muchos se gastan más de la mitad del sueldo
Pagar un alquiler y mantener en buenas condiciones la vivienda demanda más de la mitad de un sueldo, reveló con cierta alarma Pamela Gaita, presidenta de la Unión de Inquilinos de Neuquén. La referente del sector advirtió que los que más sufren esta problemática son los empleados de comercio y de empresas privadas, ya que tienen los sueldos más bajos.
La dirigente contó que los trabajadores con salarios que oscilan entre los 20 y los 25 mil pesos buscan departamentos que no pasen los 10 mil pesos, aunque aclaró que con las expensas y los servicios, pueden superar el 50 por ciento de los ingresos.
El presidente del Colegio de Martilleros, Nicolás Fundaró, se mostró de acuerdo con el cálculo, más teniendo en cuenta el peso de las expensas, que redondean un 30 por ciento del alquiler, dijo.
Gaita cuestionó que hay departamentos que se encuentran vacíos, lo que agrava la crisishabitacional en la ciudad. “Hay una diferencia entre los propietarios. Están los que tienen un departamento chiquito y usan la renta para vivir, mientras que hay personas que concentran 10 o más departamentos en su poder. Entonces, a estos últimos no les importa tener uno vacío”, contó.
Agregó que algunos propietarios ni siquiera pagan las expensas y después pretenden recargarle la deuda al inquilino.
“Tendrían que bajar los requisitos para que los departamentos no queden vacíos, pero no les interesa porque prefieren no alquilarlos antes que cobrarlos accesibles”, concluyó.