Aumenta el pedido de garrafas sociales en todo el Valle de Lerma
La crisis se nota en esta época de finales de la campaña tabacalera. Los vecinos con sus necesidades llegan a las distintas comunas buscando asistencia.
16/04/2019 MUNICIPIOSLa crisis se nota en esta época de finales de la campaña tabacalera. Los vecinos con sus necesidades llegan a las distintas comunas buscando asistencia.
La demanda por garrafas sociales aumentó considerablemente en esta ciudad, como en todos los pueblos del Valle de Lerma.
También el ingreso a los comedores municipales tiene una larga lista de espera en casi todos los casos.
Estas necesidades demuestran cómo las familias de escasos recursos buscan paliar la crisis con algo de ayuda extra del Estado, municipal en este caso.
Las comunas del interior sienten estos cimbronazos a diario. En Rosario de Lerma, terminada la temporada de tabaco, se nota la escasez de toras fuentes de trabajo y las necesidades predominan en la vida de numerosas familias, al igual que en todas las comunas de esta zona de Salta.
Las autoridades municipales focalizan su ayuda en estas familias vulnerables y en la asistencia con los comedores barriales, pero ahora también con las entrega de garrafas sociales a muchas más familias.
Aunque esta última carencia afecta también a numerosas familias de la zona céntrica de la ciudad con la necesidad del mismo tipo que de los barrios periféricos. Esto motivo al aumento de pedidos de garrafas sociales.
Con algunos días fríos, el otoño anticipa una temporada de abrigo y calefacción.
La comuna rosarina implementó la ayuda de un subsidio para bajar el costo de la garrafa social por familia. El precio es de 300 pesos, pero el municipio solventa con $200 la asistencia a la familia necesitada.
“Se ha incrementado los pedidos de garrafa social, por ahora tenemos un cupo de 25 envases por semana para las familias carentes de recursos. A cada una se les brinda una ayuda económica de $200 y ellos ponen $100 para completar lo que cuesta la garrafa. Desde la semana pasada superamos el cupo, así que comenzamos a poner a disposición más garrafas de 10 kilos. Las únicas disponibles en el mercado”, explicó Damián Guzmán, a cargo de Acción Social del municipio.
La Municipalidad y una fundación están trabajando con la entrega de estas garrafas sociales. Y el cupo por semana llega a 50.
También los comedores tienen numerosos comensales. Ahora llega a alrededor de 600 personas entre niños y adultos. Pero la lista de espera se ha duplicado. “Para la garrafa social se solicita la negativa de la Anses y dependiendo de si cobra una pensión o jubilación mínima, o solo percibe salario universal, se brinda la ayuda. Se va a tratar con el intendente de incrementar el cupo puesto que estamos viendo la necesidad de la gente en la ciudad” explicó Guzmán.
Añadió que la temática es análoga con los comedores dependientes de la Municipalidad de Rosario. “La situación es complicada. Se asiste a las familias de acuerdo a nuestras posibilidades. Los comedores tienen mucha gente, y haya en espera para un lugar, otra lista importante. Los dos años anteriores había gente en espera, en esta temporada es diferente. Se nota la recesión”, dijo.