Neuquén: La trama de los intendentes que se pelearon con el Deliberante

539508066049e5_322x226.47083360En los últimos 2 años, varios municipios chocaron con el Concejo.

Los siete intendentes que gobiernan las principales ciudades de la provincia están peleados o han tenido fuertes discusiones alguna vez con el Concejo Deliberante, razón que ha llevado a las renuncias o desplazamientos de las cabezas legislativas.

El dato sirve para entender que el equilibrio entre la guerra y la armonía es un arte de la política. Y muchos jefes comunales y concejales han caído en caminos difíciles de sostener, con renuncias y fuertes amenazas a la gobernabilidad.

La última gran pelea se dio en Centenario, en la previa de las elecciones del PJ, realizadas el 18 de mayo. En ese momento, el intendente Javier Bertoldi se distanció con fuertes discusiones con Oscar Nahuel, titular del cuerpo deliberativo, por una interna partidaria.

Las razones fueron políticas. Bertoldi se impuso y ahora están peleados. Pero Nahuel se quedó al mando del cuerpo. De fondo, existe un debate por la sucesión y el lineamiento peronista de cara a 2015. Sin embargo, falta mucho y mientras tanto hay que gobernar.

Trifulcas hay en todos lados. En Junín de los Andes, el jefe comunal, el peronista Juan Domingo Linares, también se peleó con la ex viceintendenta, Andrea Rosso (UNE). Asumieron en un frente común (Frente Juninense) pero las diferencias terminaron con el quiebre de la alianza y la renuncia de Rosso, a finales de 2013.

En Neuquén, Horacio Quiroga se distanció del radical y entonces titular del Concejo, Gastón Contardi, por el proyecto para urbanizar la Isla 132. A los pocos meses, cuando se votó nuevamente la presidencia, los ediles lo desplazaron y esta quedó en manos de David Schlereth, quien lideró la lista del intendente en las últimas elecciones para concejales.

En Plottier, Andrés Peressini tuvo sus tormentas. Viene del radicalismo y la alianza que armó con el Frente para la Victoria para gobernar le duró poco. Su ex presidenta del Concejo, Graciela Suárez, fue desplazada del cargo. En su lugar votaron a Edith Cárcamo, de la UCR, una persona de confianza del jefe comunal.

San Martín de los Andes no está mejor. Juan Carlos Fernández, otro justicialista, comenzó a pelearse con su presidente en el Deliberante, Julio Obeid, desde el inicio de su gestión, en 2011. Pero todo reventó cuando a principios de 2012 hubo una fuerte discusión entre el secretario de Gobierno, Guillermo Carnaghi, y el mismo Obeid. El acalorado debate habría terminado con agresiones físicas y, desde ese momento, Fernández tuvo dificultades para lograr la mayoría propia. Obeid aún sigue en el cargo, pero con los “decibeles más bajos”, explican quienes conocen la política desde adentro.

En Cutral Co, Ramón Rioseco también chocó con el presidente del Deliberante. En su momento, el radical Carlos Arens no estuvo de acuerdo con la adhesión a la re-reelección, pegó un portazo y la presidencia quedó para Francisco Quevedo.

En Zapala, Soledad Martínez, del Frente Grande, se peleó con su presidenta del cuerpo, Blanca Barrionuevo. Cuentan que la discusión fue por la condonación de la deuda a un club local. Desde ese entonces, hay encontronazos.

Los que viven en más armonía -o por lo menos disimulan- son los intendentes del MPN en algunas ciudades. En Rincón, Marcelo Rucci trabaja en consonancia con su presidente, Rubén Tojo. Pero casi no hay oposición.

En Chos Malal, Rolando Figueroa tiene buena relación con la titular del Deliberante, Anahí Riquelme. También sucede en San Patricio del Chañar con Ramón Soto y su viceintendente (que oficia como presidente del cuerpo), Huberto Rivero. Y en Huincul, Juan Carlos Giannatassio hasta ahora no tiene problemas, o al menos no lo demuestra.

Fuente: La Mañana de Neuquén