Bariloche y una evaluación “superpositiva” de la tasa que ya cumplió 3 años
Las obras ejecutadas con la recaudación del gravamen ya superó los 121 millones de pesos.
30/12/2019 MUNICIPIOSLas obras ejecutadas con la recaudación del gravamen ya superó los 121 millones de pesos.
La tasa al turista fue puesta en marcha por el intendente Gustavo Gennuso hace casi tres años y en un principio generó reproches y fuerte resistencia de los hoteleros, pero hoy quedó incorporada al sistema tributario municipal, con un grado de aceptación mucho mayor.
La clave para ese cambio de mirada pasó en buena medida por las obras ejecutadas con la recaudación del gravamen, que ya superó los 121 millones de pesos.
La construcción de miradores en Circuito Chico, la parquización y embellecimiento del acceso este y también en el sur, la remodelación de la Costanera –donde fue emplazado un “pump track” y está a punto de estrenarse un skate park– son algunas de las inversiones afrontadas con la tasa.
El secretario de Turismo del municipio, Gastón Burlón, evaluó la implementación de la llamada “ecotasa” como “súper positiva” y aseguró que su aplicación “no influyó para nada en la cantidad de pasajeros” que arriban a la ciudad.
Ése había sido uno de los temores expresado en su momento por los empresarios del sector, que en algunos casos iniciaron causas judiciales para pedir que la tasa (al que llaman impuesto) sea declarada re inconstitucional. También accionó contra la tasa de Bariloche el gobierno nacional.
Esas causas no han avanzado hasta ahora y según Burlón, de los prestadores turísticos firmantes “muchos han desistido y sólo quedan un par”.
A su juicio, “no existe en el mundo un turista que deje de viajar a un destino por una tasa de 30 pesos por día”.
Ese es el valor actual del tributo para quien se aloja en hoteles de una estrella. Se aplica por pernocte, con un máximo de tres días por persona. Quien se queda más tiempo no pagará más que tres jornadas.
A partir de enero la tarifa para esa categoría subirá a 40 pesos.
El rango actual de la tasa –segmentada por tipo de alojamiento– va de los 10 a los 100 pesos. Comenzó a regir en febrero de 2017 y ese año la recaudación fue de 20,9 millones de pesos, en 2018 recaudó 37,59 millones y este año, hasta el 30 de noviembre llevaba 63,07 millones.
Burlón dijo que “los grandes hoteles la incluyen en la facturación y la deducen de impuestos”, de modo que el turista ni se entera. Mientras que los demás establecimientos la cobran con talonarios aparte que deben retirar en la secretaría de Turismo. El turismo estudiantil declara cuántos pasajeros trae por temporada y la paga por anticipado.
Burlón destacó que el sector hotelero tiene participación en la mesa que decide las obras a realizar “y que controla el destino de cada centavo”. Dijo que ese mecanismo también contribuyó a mejorar la aceptación de la tasa.
Señaló que para el año próximo el objetivo es dedicar los fondos al mejoramiento general del Centro Cívico.