Acusaron al municipio de Salta de no hacer «nada» por los carreros
Ayer hubo otra reunión, pero siguen sin encontrar soluciones.
Es la misma crónica del 9 de septiembre de 2014.
Ya van tres meses de reuniones y no hay solución alguna. Es más, ayer acusaron el Ejecutivo municipal de no haber hecho nada, en este tiempo, para avanzar en una solución.
La reunión se realizó ayer, en el Concejo Deliberante y estuvieron presentes los carreros, miembros del Ejecutivo municipal, concejales, proteccionistas de animales y profesionales veterinarios.
La convocatoria fue determinada luego de que ediles consideraran que transcurrió un tiempo prudencial para que se elaboraran alternativas a las ordenanzas N§ 14202 y N§ 14070, que establecen el reemplazo de animales y carros por motos o triciclos de carga.
Sin embargo, ningún funcionario llevó nada y todas los discursos apuntaron al secretario de Gobierno, Mauro Sabadinni, por no haber realizado el censo social al cual se había comprometido y por no destinar el presupuesto a Tránsito para los controles.
La edil del PO, Marta Martín, se animó hasta decir que «habría que multar al municipio por las dependencias vacías de Zoonosis».
En tanto que el delegado de los carreros, Fredy Víctor Flores, volvió a defender la fuente laboral de las más de 1.200 familias que viven de los 800 carros que aproximadamente circulan en la ciudad. Para el turno de Carina Werber se encargó de valorar a la mujer carrera.
De las entidades protectoras estuvieron Elva Moreira por la Fundación San Roque; Silvina Leal por Fundación Nuevo Mundo; Lucas Iñigo, presidente de PAS; Rita Acosta por ALFA Salta; Diego Corimayo y Estela Morales por APAN; y Carolina Diatre, por LUBA.
Las posturas fueron amplias. Algunos quieren trabajar junto a los carreros para buscar soluciones y otros hablaron de «crear escuadrones» para la protección de los animales.
El que finalmente golpeó la mesa fue Sabadinni quien destacó lo que considera «los grandes pasos» del municipio. A pesar del énfasis de su discurso no pudo explicar la evidente inacción que lleva tres meses.
