Afiliados de ATE tomaron la Municipalidad de Miramar tras el despido de empleada
Acusan al intendente massista de despedir por decreto a una empleada del hospital municipal por realizar planteos gremiales. Sostienen que no hay fundamentos concretos.
Tras el despido de una empleada del hospital municipal de Miramar, partido de General Alvarado, y luego de agotar distintas alternativas, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) tomó hoy el palacio comunal en señal de protesta y con denuncias de persecución gremial.
La seccional local –que depende de la regional de General Pueyrredón (Mar del Plata) – reclamó con urgencia una reunión con autoridades municipales para dar marcha atrás con la decisión del jefe comunal del Frente Renovador, que despidió por decreto a la enfermera Carina Salinas el 14 de junio de este año.
Por ese reclamo, los afiliados de ATE tomaron el Palacio Municipal y se apostaron en el cuarto piso, donde el jefe comunal interino, Germán Di Cesare, tiene su despacho. Al cabo de unas horas, los trabajadores decidieron retirarse con el anuncio de más medidas de fuerza de ser necesario.
“No hubo llamado de atención ni referencias sobre un eventual mal desempeño. El único fundamento es que existe persecución gremial. Se la despidió por ponerse al frente de reclamos del hospital como mejores salarios, más insumos y observaciones sobre las ambulancias, que al parecer no están en condiciones de circular”, dijo a INFOCIELO, Carlos Díaz, titular de ATE regional.
Díaz destacó que la decisión de Di Césare se ampara en la ley provincial 11.757 del actual Estatuto del Personal Municipal, que veda distintos derechos a los trabajadores comunales y sobre la que existen distintos proyectos para su reemplazo. “Los intendentes pueden cometer arbitrariedades y despedir a alguien sin la debida sustanciación o realización de sumario”, agregó.
En ese sentido, el dirigente de ATE cuestionó los argumentos utilizados por el jefe comunal, reemplazante en el cargo del senador bonaerense Patricio Hogan: “que el cargo no estaba presupuestado, que no hubo concurso previo y que ingresó con una categoría superior a la que le correspondía”, apuntó.
“En todo caso esas son cuestiones que tienen que resolver la propia municipalidad sin castigar a la trabajadora. Se desempeñó durante muchos años como contratada y faltaban días para que adquiriera estabilidad laboral, al cumplir un año en planta permanente. Es muy llamativo”, consignó Díaz.
Luego de ocupar durante toda la mañana el Palacio Comunal, ATE se retiró a la espera de novedades. “Nos suspendieron una reunión con el secretario de Gobierno. Esperamos que se revierta. Vamos a insistir por todos los medios políticos y jurídicos para que la trabajadora sea reincorporada”, afirmó el dirigente gremial.
