Aplazan un informe parlamentario sobre la gestión de la pandemia de Bolsonaro
Según la prensa brasileña, persisten diferencias entre los miembros de la comisión sobre el contenido del informe, y se programaron nuevas audiencias para la próxima semana.
Según la prensa brasileña, persisten diferencias entre los miembros de la comisión sobre el contenido del informe, y se programaron nuevas audiencias para la próxima semana. La comisión parlamentaria no tiene atribuciones para iniciar procedimientos legales, pero su informe se enviará a los órganos competentes.
La divulgación del informe de una comisión parlamentaria en Brasil que investigó las posibles omisiones del gobierno del presidente Jair Bolsonaro durante la pandemia de coronavirus, programada para el martes próximo, fue pospuesta sin fecha, anunció este domingo el Senado.
En el sitio web de la Cámara alta aparecía este domingo por la tarde en rojo la mención «aplazada» en la agenda de la comisión parlamentaria del martes, cuando su relator, Renan Calheiros, debía leer un informe de más de mil páginas.
«Esta decisión (de aplazamiento) fue tomada por el presidente (de la comisión), Omar Aziz. Estoy de acuerdo con él, tendremos más tiempo para discutir», explicó Calheiros al portal G1.
Según la prensa brasileña, persisten diferencias entre los miembros de la comisión sobre el contenido del informe, y se programaron nuevas audiencias para la próxima semana.
El viernes, el relator había anunciado 11 cargos contra el presidente Bolsonaro, entre ellos «homicidio por omisión», «charlatanería», «genocidio de indígenas» o «crimen de lesa humanidad», reseñó la agencia de noticias AFP.
Instalada hace casi seis meses, la Comisión Parlamentaria del Senado (CPI) escuchó a casi 60 testigos durante audiencias a menudo tormentosas, con muchas revelaciones comprometedoras para el gobierno.
El Senado brasileño postergó el informe parlamentario
Los senadores primero intentaron establecer las responsabilidades de las autoridades locales y federales en la grave escasez de oxígeno que provocó la muerte de decenas de pacientes por asfixia en hospitales de Manaos (norte) en enero.
La CPI también investigó la demora en la compra de vacunas, pero descubrió otras irregularidades, incluidas sospechas de corrupción.
Bolsonaro también fue señalado por su discurso anticonfinamiento y por haber elogiado los méritos de los ineficaces «tratamientos tempranos» contra el virus, en particular a base de hidroxicloroquina.
La CPI no tiene atribuciones para iniciar procedimientos legales, pero su informe se enviará a los órganos competentes, ya sea la fiscalía o el Tribunal de Cuentas.
Desde el inicio de la pandemia Brasil reportó 601.574 muertes sobre 21.597.949 contagios.
