Arrasadora victoria en Río de Janeiro de un pastor evangélico frente a un socialista
La segunda ronda de las elecciones municipales brasileñas confirmó ampliamente la caída en picada del PT y sus aliados de izquierda.
31/10/2016 EL MUNDOLa segunda ronda de las elecciones municipales brasileñas confirmó ampliamente la caída en picada del PT y sus aliados de izquierda.
La centroderecha brasileña dio ayer otro paso adelante, mientras sus adversarios del PT y la izquierda se vieron forzados a un nuevo retroceso en las segundas vueltas de las elecciones municipales en 57 ciudades de Brasil. El caso más importante —pero no el único— fue Río de Janeiro, donde el conservador pastor evangélico Marcelo Crivella arrasó con casi 60% de los votos y dejó muy atrás al socialista Marcelo Freixo, que apenas superó el 40%. En otras ciudades clave, como Porto Alegre, otrora bastión del PT de Lula, la lucha fue exclusivamente entre centroderechistas. Y el partido PMDB del presidente Michel Temer se impuso en numerosas ciudades. Desde la primera vuelta, el PT perdió, además de San Pablo, 373 ciudades.
Pero el caso que ayer llamaba más la atención era el de Río, por el peso que tiene esta ciudad a nivel nacional y porque el vencedor, Marcelo Crivella, es un pastor evangélico de la poderosa IglesiaUniversal del Reino de Dios. En su juventud, Crivella llamó «demoníacos» a los católicos y descalificó a los homosexuales. Crivella, del partido de derecha PRB (Partido Republicano de Brasil), obtuvo 59,36% de los votos, frente a un lejano 40,64% de Marcelo Freixo, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL).
Los brasileños votaron en los municipios donde ningún candidato obtuvo la mayoría absoluta el pasado 2 de octubre. Decenas de ciudades grandes y medianas volvieron así a las urnas. Se confimó el hundimiento ya visto en el primer turno de la izquierda que representa el PT de Lula y Dilma Rousseff, destituida en agosto. El partido que gobernó Brasil durante 13 años perdió casi dos tercios de sus ciudades, con el peor golpe en San Pablo, mientras que la formación del presidente Michel Temer (PMDB) fue la que más ciudades ganó. Otro partido aliado de Temer, el PSDB del ex presidente Fernando Henrique Cardoso, ya se había afirmado como una fuerza de gran calado en la primera vuelta, con la victoria en San Pablo, el municipio más poblado y rico del país, donde destronó al PT.
Río de Janeiro, la «Cidade Maravilhosa», abrió su etapa post-olímpica sumida en una grave crisis económica y de seguridad, que deja atrás ocho años de gestión de Eduardo Paes, del PMDB, el partido de Temer. La contienda quedó reducida a dos personajes antagónicos: de un lado, Crivella, un senador conservador y obispo evangélico de 59 años, y del otro, el disidente del PT y ex diputado estatal de extrema izquierda Marcelo Freixo, de 49. Perdió netamente Freixo, por casi 20% de los votos frente a Crivella.Este resultado posiciona en el primer plano nacional a Edir Macedo, tío de Crivella y fundador de la Iglesia Universal del Reino de Dios, además de dueño de la TV Record, la segunda del país. Crivella fue ministro de Pesca de Dilma Rousseff en 2013, pero luego en el Congreso votó a favor de destituirla. Pero a la vez en Río de Janeiro hizo campaña contra el PMDB de Temer y del alcalde saliente de ese partido, Eduardo Paes. Como sea, este resultado tan neto en la segunda ciudad de Brasil ratifica que la izquierda brasileña ha dejado atrás su época de oro.
Belo Horizonte. Otras 17 capitales de Estados eligieron alcalde. En Belo Horizonte, el ex presidente de Atlético Mineiro Alexandre Kalil, del Partido Humanista, gobernará la estratégica capital de Minas Gerais. Le ganó al ex arquero del mismo club Joao Leite, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), en una derrota significativa del titular del partido y hombre fuerte de Minas Gerais, el senador Aecio Neves, la cual atenta contra sus planes para ser precandidato presidencial en 2018. El PSDB sorprendió al ganar por primera vez Porto Alegre, capital de Rio de Grande do Sul, y confirmó su fortaleza en las amazónicas Manaos y Belem. El Partido Socialista Brasileño PSB, dividido por su apoyo a Temer, logró la victoria contra el PT en Recife, capital de Pernambuco, estado natal de Lula