Bariloche: en 6 meses cerrará el 74% de los comercios si continúa la crisis
Así lo consignó la Cámara que representa al sector en esta ciudad tras una encuesta que hizo entre los socios. La caída de la facturación superó el 50 % entre abril y junio pasado, en comparación con el mismo período de 2019
11/08/2020 ECONOMÍAAsí lo consignó la Cámara que representa al sector en esta ciudad tras una encuesta que hizo entre los socios. La caída de la facturación superó el 50 % entre abril y junio pasado, en comparación con el mismo período de 2019 por la crisis causada por el coronavirus.
Una encuesta que la Cámara de Comercio de Bariloche hizo entre el 25 y 31 de julio pasado arrojó que el 74 por ciento de las empresas podrá mantenerse operativa por un lapso máximo de hasta 6 meses si la crisis por la pandemia, causada por el nuevo coronavirus, persiste.
El turismo está paralizado desde mediados de marzo pasado por las sucesivas cuarentenas obligatorias impuestas por el presidente Alberto Fernández, como medidas de prevención sanitaria para evitar la propagación del virus en el país. El turismo es el motor de la economía de Bariloche.
El informe releva que los dueños del 6 por ciento de las firmas respondieron que no tiene margen y cerrarán en el corto plazo, otro 6 por ciento estimó que podrá aguantar un mes.
Mientras que un 38 por ciento de las empresas del sector estima que resistirá hasta 3 meses y un 24 por ciento tiene espaldas para soportar, en las actuales condiciones económicas, hasta 6 meses. En cambio, el 8 por ciento de las empresas del sector tiene posibilidades de mantenerse a flote por 12 meses y el 18 por ciento por más de 1 año.
Además, en el documento consignaron que el 76 por ciento de las empresas tuvieron una caída de la facturación superior al 50 por ciento durante abril, mayo y junio pasado, en comparación con el mismo período del año pasado.
El informe, que la entidad difundió este lunes, señala que el 36 por ciento de las empresas del sector registraron una baja de entre el 50 y 79 por ciento de sus ingresos en el trimestre analizado. En otro 30 por ciento, la facturación cayó más del 80 por ciento respecto al mismo lapso de 2019 y el 10 por ciento que facturó cero.
La encuesta entre los asociados de la Cámara de Comercio destaca que el 19 por ciento de las empresas del rubro bajaron entre el 19 y 49 por ciento la facturación.
Dice que el 3 por ciento de los comercios mantuvieron entre abril y junio último la misma facturación nominal que en el mismo trimestre del año pasado. Y el 3 por ciento sostuvo que su facturación creció más de un 5 por ciento en ese período evaluado.
Consigna que sólo un 20 por ciento de los comercios pudieron cubrir sus gastos fijos. Y el 79 por ciento se endeudó para sostener su negocio.
Por eso, pidieron un paquete de medidas tributarias y créditos para sostener al sector, y “la apertura de todas las actividades, incluido el turismo, que todo pueda funcionar en forma normal tomando los recaudos y protocolos necesarios en cada actividad”.
Hasta la última semana de julio pasado, el 18 por ciento de las empresas no había podido pagar los salarios de su personal, el 24 por ciento lo había hecho parcialmente y sólo el 59 por ciento cumplió y lo abonó dentro del mes.
En relación al medio aguinaldo, el 21 por ciento de los comercios lo están abonando en cuotas y el 28 por ciento no lo pagó aún. El 51 por ciento lo pagó sin atraso.
El 73 por ciento de las empresas hicieron uso del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP) para el pago de salarios. Aún así, el 64 por ciento adujo dificultades para abonar los correspondientes al período julio.
“Este panorama crítico se visualiza en que el 29 por ciento de las empresas tuvieron que reducir su planta o suspender parte de su personal”, advirtieron en el informe de la Cámara de Comercio local.
El documento señala que el 54 por ciento contrajo deudas a pagar en plazos mayores a los 24 meses. Según el informe, el 55 por ciento de los que respondieron la encuesta pertenece al sector del comercio minorista y mayorista, 8 por ciento a la industria manufacturera, otro 8 por ciento al rubro del transporte, almacenamiento y comunicaciones.
El resto se divide en distintas actividades, como gastronomía, enseñanza, construcción, inmobiliarias, agricultura, ganadería, silvicultura y otras actividades comerciales y de servicios.
El 26 por ciento de las empresas que participaron de la muestra llevan más de 30 años de actividad comercial en la ciudad, otro 47 por ciento tiene desde 10 hasta 29 años de trabajo, un 12 por ciento, entre 5 y 9 años y el restante 16 por ciento acreditó una antigüedad menor a los 5 años en el sector.
El informe sostiene que el 43 de estos negocios mantienen restricciones para desarrollar sus actividades, un 5 por ciento aún no pudo abrir en lo que va de la pandemia y 51 por ciento restante está funcionalmente operativo.
Sólo el 40 por ciento de los establecimientos abonó totalmente el período marzo/abril/mayo de la Tasa de Inspección, Seguridad e Higiene (TISH). Pero bajó al 35 por ciento en nivel de cumplimiento en junio.
En cuanto al pago de Ingresos Brutos a la Provincia, el 50 por ciento lo hizo por los meses de marzo/abril/mayo y disminuyendo a un 41 por ciento los que pagaron junio. El 24 por ciento no pudo pagar los impuestos nacionales y un 41 por ciento los abonó parcialmente.
El informe dice que los encuestados solicitaron, para poder sostener su actividad, créditos blandos a tasa 0% con meses de gracia y devolución en 36 cuotas, para regenerar capital de trabajo.
Pidieron la exención de tasas e impuestos por los períodos en los que no se pudo trabajar. “Hasta ahora se han conocido solo medidas que implican prórrogas, pero difícilmente los comercios puedan cubrir esos pagos”, aseguraron.
También, plantearon la “posibilidad de negociar reducción de salarios durante los períodos en los que no se trabaja o que en su defecto el Estado mantenga el Programa ATP, pero sin restricciones mientras dure el estado de emergencia por la pandemia”.
La “posibilidad de renegociar montos y vencimientos de servicios públicos, agua, saneamiento urbano, residuos comerciales, energía, especialmente en aquellos casos donde hay parámetros fijos de consumo o por ejemplo de potencia contratada que no se está utilizando por estar cerrados”.
Requirieron además una baja de tasas e impuestos municipales, provinciales y nacionales, una reforma laboral e impositiva y la apertura de todas las actividades, incluido el turismo, que todo pueda funcionar en forma normal tomando los recaudos y protocolos necesarios en cada actividad.