Bolsonaro con récord de imagen negativa
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, tiene el 33% de imagen negativa, la reprobación más alta de un mandatario desde 1990
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, tiene el 33% de imagen negativa, la reprobación más alta de un mandatario desde 1990, según una encuesta publicada ayer, tras la silbatina que sufrió el domingo de parte de un sector del público que asistió a la final de la Copa América en el estadio Maracaná.
Electo en octubre de 2018 con el 57% de los votos válidos, el mandatario tiene el 33% de imagen buena o excelente; 33% mala o pésima y 31% regular. Con esos números Bolsonaro es el mandatario con más alto índice de rechazo en los primeros seis meses de gestión, desde 1990.
Hace 29 años, el entonces presidente Fernando Collor de Mello tenía 34% de aceptación y 20% de imagen negativa al cumplir medio año en el Palacio del Planalto.
La encuesta de la agencia Datafolha, publicada ayer, muestra que los índices de respaldo y repudio de Bolsonaro permanecen estables respecto de la medición anterior realizada hace tres meses, con variaciones dentro del margen de error de dos puntos hacia arriba o hacia abajo.
En tanto, en los últimos tres meses las expectativas de que este gobierno sea bueno pasaron del 59% al 51%.
La consulta de Datafolha fue realizada entre el 4 y 5 de julio en 130 ciudades del todo el país.
Tanto esa consultora, vinculada al diario Folha de San Pablo, como otras coinciden en la descripción de la pérdida de popularidad del excapitán que asumió el 1 de enero.
A fines del mes pasado la encuestadora Ibope indicó que la imagen positiva del mandatario bajó del 35% al 32%, mientras la reprobación subió del 25% al 32% en el lapso de un trimestre.
Entre la primera semana de enero pasado y la última de junio Bolsonaro perdió 17 puntos de respaldo de la opinión pública, al tiempo que su rechazo subió 21 puntos, de acuerdo con el sondeo de Ibope contratado por la Confederación Nacional de la Industria.
Más allá de las mediciones demoscópicas el presidente comprobó en primera persona el domingo que una parte de la sociedad no ha recibido de buen grado lo hecho en los primeros meses de una gestión que concluirá el 31 de diciembre de 2021.
Una parte importante de los casi 69.000 espectadores que estaban en el Maracaná prodigaron una sonora silbatina a Bolsonaro cuando ingresó al campo de juego tras la conclusión del partido en que Brasil derrotó 3-1 a Perú en la final y conquistó la Copa América.
También hubo aplausos y vivas de parte de un sector de la «torcida» que se dio cita en el Maracaná.
Según los diarios O Globo, Folha y El País, edición Brasil, el ruido de los disconformes fue más audible que el generado por los bolsonaristas. El pasado domingo Bolsonaro se unió a los jugadores de la selección nacional en el medio del campo de juego y alzó la copa de campeón continental, algo que habitualmente no hacen los presidentes.
Algunos jugadores y miembros del cuerpo técnico, salvo el DT Tite, festejaron la llegada del presidente.
