Chubut está asediada por sus problemas de endeudamiento

Esta provincia junto a Jujuy y Buenos Aires son las tres jurisdicciones que se encuentran en situación crítica por sus altos endeudamientos en dólares.

Esta provincia junto a Jujuy y Buenos Aires son las tres jurisdicciones que se encuentran en situación crítica por sus altos endeudamientos en dólares. El 80% de los ingresos de Chubut está destinado al pago de sus deudas. En 2021 se duplicará el vencimiento de su deuda y se volverá inviable para el Gobierno de Mariano Arcioni.

Chubut arrastra problemas financieros desde hace años. El grueso de su deuda está garantizado con regalías petroleras, pero la caja no alcanza para enfrentar los vencimientos de 2020 y el gobernador Mariano Arcioni lo reconoció incluso antes de las elecciones cuando se convirtió en la primera provincia en anunciar la reestructuración de su deuda.

Los datos de 2018 detallan que el grueso de la deuda supera el 80% de los ingresos provinciales y que durante este año deberá enfrentar pagos por 49 millones de deuda con el mercado. En tanto, en el 2021 deberá abonar 114 millones y en el 2022 pagará 108 millones. El problema nace en los casi 30 millones de dólares trimestrales que viene pagando y que a partir de 2021, al duplicarse el vencimiento de capitales, se volverá inviable para las arcas provinciales. Es que las necesidades de financiamiento de Chubut en 2019 eran de 12 puntos porcentuales de sus ingresos corrientes entre gastos corrientes, gastos de capital y servicios de deuda.

Otra de las provincias con dificultades económicas es Buenos Aires de quien enfrenta vencimientos por 169.000 millones de dólares para este año. Esto eleva las necesidades de financiamiento a algo más de $10 por cada $100 que se produce en la provincia (PGB), lo que la vuelve impagable tal y como advirtió la consultora Elypsis en uno de sus últimos informes.

De la deuda denominada en dólares, en 2020, el gobierno de Axel Kicillof debería pagar casi 2.100 dólares, alrededor de 850 millones de ellos a bonistas y la mayor parte de los mismos en la primera mitad del año. Por esa razón es la provincia con la peor situación financiera: en términos de sus ingresos, la deuda provincial asciende al 84%, pero además el 77% está en dólares y es la más voluminosa de todas las deudas provinciales. Por eso el mercado espera que próximamente Kicillof llame a una reestructuración o directamente defaultee.

Según detalla La Política Online, Jujuy es otra de las provincias que padece los vencimientos de su deuda. Gerardo Morales, al igual que María Eugenia Vidal, fue uno de los gobernadores que más emitió deuda durante la gestión de Mauricio Macri dejando a Jujuy con 1.700 millones de dólares de deuda y el mayor ratio de deuda en relación a los ingresos: 87%; de los cuales además el 85% está en dólares. Sin embargo, este 2020 no tiene que pagar capital, solo 9 millones de dólares de intereses en septiembre por el bono Jujuy 2022.

PROVINCIAS MAS ALIVIADAS

El último ranking del área de investigaciones de la banca Barclays estipula que, con los mismos 12 puntos de necesidades financieras por encima de los ingresos, se ubicaba la provincia de La Rioja, aunque como no tiene vencimientos de deuda en 2020 sus desbalances no la empujan al default como sí a Chubut y a Buenos Aires.

Mendoza y Córdoba no tienen ratios de deuda sobre ingresos exorbitantes, pero tampoco están en condiciones favorables ya que dependen casi exclusivamente de que el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, pueda reabrir en el corto plazo los mercados voluntarios de deuda antes de que se les vengan los vencimientos grandes.

El caso de Córdoba puede ser la sorpresa de 2021 cuando los vencimientos de capital se multipliquen por veinte y pasen de los 38 millones anuales de 2019 y 2020 a nada menos que 763 millones. Ya de por sí, en el ranking de Barclays las necesidades financieras totales ascienden a 11 puntos de sus ingresos corrientes. En tanto que Mendoza deberá atender vencimientos de capital de 167 millones de dólares anuales entre 2022 y 2024, pero sus necesidades financieras son moderadas en relación al resto de las provincias (5,5% de los ingresos).

En ambos casos, recortando toda la obra pública y renovando la deuda intra sector público, estas provincias logran ser superavitarias por 6,7 y 5,3 puntos de sus ingresos, lo que en el corto plazo les permitiría mantener alejado al fantasma del default.

Fuente: Patagónico