Ciclovías en Bahía Blanca: costaría 20 millones la primera etapa

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Es una estimación de la UTN, a pedido del municipio. El proyecto prevé adecuar unas 125 cuadras.
Si bien no existe partida en el presupuesto municipal de este año y seguramente la concreción de la red de ciclovías será obra (o no) del próximo intendente, al menos ya existe una estimación de lo que deberá invertirse en la primera de las cuatro etapas: 20 millones de pesos.

Esa evaluación surge de un análisis realizado por la Universidad Tecnológica Nacional, a pedido de la comuna.

El cómputo y presupuesto consideran componentes como pintura, señalización, cartelería, divisores (tachas reflectivas y delineadores verticales) y semaforización.

La proyección del valor total se obtiene a partir del presupuesto preparado para el eje Lavalle-España, entre Beruti y Dorrego (8 cuadras), que exige, por caso, la colocación de 280 tachas, 9 semáforos y 28 postes, quedando sin cotizar las posibles tareas de repavimentación.

Materializar la ciclovía en este recorrido supone 1,26 millones de pesos, lo cual implica un valor promedio de 157 mil pesos por cuadra. Proyectado ese costo a las 125 cuadras que abarca la primera etapa del plan se llega a los 20 millones indicados.

Esta será una de las varias cuestiones que se discutirá en la audiencia pública del viernes 24 –la inscripción para participar abrirá mañana en el municipio–, cuyos resultados se elevarán al Concejo Deliberante, que deberá sancionar la ordenanza.

En su análisis de la cuestión integral, los profesionales de la UTN explican los motivos por los cuales el uso de las bicicletas no se advierte con intensidad en la ciudad. Observan como principales inconvenientes una fuerte cultura automovilística, la inactividad física y el ritmo de vida acelerado.

Ese conjunto provoca que la bicicleta quede relegada a quienes no tienen otra opción de desplazamiento, siendo el ciclista urbano «un marginado». Dicen además que la ciudad ha tenido un crecimiento «desmesurado», con grandes dimensiones territoriales, un transporte público no organizado para atender esa necesidad ni una infraestructura que garantice un uso seguro de la bicicleta. También se nota la falta de estacionamiento específico y de carriles ciclísticos que articulen los barrios con el centro.

A su vez, el estudio incluye las condiciones favorables. Las distancias de hasta 10 kilómetros son ideales para cubrirlas en bicicleta, teniendo Bahía un radio aproximado de 7 kilómetros. También favorece la ausencia de grandes pendientes y la importante población estudiantil.

Fuente: La Nueva