El comercio y la industria, con dos años de estancamiento en Río Cuarto

Según las cifras oficiales de la Municipalidad, el año pasado la facturación de las empresas estuvo apenas por encima de la inflación. En 2016, la situación había sido aún peor: hubo una baja real 

Según las cifras oficiales de la Municipalidad, el año pasado la facturación de las empresas estuvo apenas por encima de la inflación. En 2016, la situación había sido aún peor: hubo una baja real
La industria y el comercio de Río Cuarto no atinan a dar señales de recuperación: acaban de cerrar dos años consecutivos de estancamiento, con facturaciones que han estado apenas equiparando su crecimiento con la inflación; es decir, no han tenido mejoras reales sino sólo motivadas por la suba de precios.

Según el informe anual que presenta la Municipalidad de Río Cuarto ante el Concejo Deliberante, durante el 2017 la industria y el comercio de Río Cuarto vieron incrementados sus ingresos en un 26,66 por ciento; si se compara esa cifra con el 25 por ciento de inflación oficial que hubo en la provincia, existe un alza mínima con respecto al incremento de precios que no alcanza para darle impulso a la actividad.

Las empresas riocuartenses pagaron 401.031.185 pesos en concepto de la Contribución de Comercio e Industria, 84,4 millones de pesos más que el año anterior, lo que implica un 26,6 por ciento de suba. Ese comportamiento no solamente retrasó las expectativas de las empresas sino que también impactó en las previsiones que había hecho el gobierno municipal, que había calculado que en 2017 tendría ingresos por 15,5 millones de pesos más en Comercio e Industria de los que finalmente registró.

Pero el 2016 tampoco había sido mejor, según ese mismo informe. Ese año, la inflación alcanzó el 40 por ciento anual y la facturación de los comercios, las industrias y las empresas de servicios en Río Cuarto tuvieron un incremento de la facturación del 37 por ciento. Es decir, en esa oportunidad existió una caída en términos reales, que apenas si llegó a recuperarse con la tibia suba del 2017.

El dato del comercio y las empresas de servicios es especialmente relevante en Río Cuarto porque son el motor principal de la economía de la ciudad; un estancamiento en esos dos rubros deja sin alternativas para que haya un crecimiento a través de otros rubros.

Locales vacíos

La difícil situación del comercio es notoria en el microcentro, donde se concentran la mayoría de los locales. Desde las entidades empresarias manifiestan preocupación por la cantidad de comercios que han cerrado y de locales vacíos que se ven en el centro de la ciudad.

Ese hecho es un indicio irrefutable. Las principales causas son que los costos han continuado creciendo mientras que los ingresos no se ajustan hacia el alza como deberían para compensar la inflación.

Este diario publicó hace semanas que hay locales en la calle Rivadavia que debieron cerrar sus puertas después de décadas porque les habían pedido 100.000 pesos mensuales en concepto de alquiler, una cantidad prohibitiva, al menos en el contexto actual. Si a esa elevada cifra se le suman los costos laborales, impositivos, en servicios básicos, los montos que deben facturarse se hacen imposibles.

Como contrapartida, los precios siguen en ascenso, lo que provoca que los consumidores se retraigan y compren menos. Así, el circuito comercial padece la situación que está sufriendo actualmente.

El resto de los impuestos que cobra la Municipalidad no han tenido un comportamiento similar a Comercio e Industria. Las patentes, el Inmobiliario y la coparticipación tuvieron mejoras considerables, todas por encima de la inflación pero porque están atadas a otras variables.

En el gobierno municipal esperan una recuperación del comercio y la industria porque es una de las contribuciones más importantes del esquema impositivo y, por lo tanto, es central para cumplir con las premisas fijadas en el presupuesto.

Fuente: Puntal