Comercios: En el peor de los mundos

La balanza comercial de septiembre profundizó las tendencias negativas del comercio exterior. Bajaron las exportaciones, en especial a Brasil, y aumentaron las importaciones de bienes finales.

La balanza comercial de septiembre profundizó las tendencias negativas del comercio exterior. Bajaron las exportaciones, en especial a Brasil, y aumentaron las importaciones de bienes finales.

El saldo comercial cerró el mes pasado con un superavit de 360 millones de dólares, gracias a que las importaciones cayeron más de lo que lo hicieron las exportaciones frente al mismo período de 2015. Según los datos que el Indec publicó ayer, en nueve meses el resultado del comercio exterior es superavitario en 2089 millones de dólares a raíz de la baja del nivel de actividad, frente a un déficit de 1243 millones a esta altura del año pasado. Si bien las importaciones cayeron 15,2 por ciento en septiembre, las compras al exterior de bienes de consumo, que desplazan a la industria local, crecieron 10,8, mientras que el ingreso de autos importados subió un 23,3 por ciento, en un contexto de retracción de las automotrices y autopartistas nacionales. En el año también son los únicos rubros que crecen en el escenario importador.

La balanza comercial mejoró este año frente al anterior porque la caída del nivel de actividad de la economía impactó a la baja en las importaciones de insumos y bienes de capital. Entre enero y septiembre las importaciones globales bajaron 8,9 por ciento. Casi una tercera parte de las compras al exterior se explica por bienes intermedios, que caen en el año 14,3 por ciento. Combustibles y lubricantes muestran una merma del 32,3 por ciento; piezas y accesorios para bienes de capital, del 12,4; y bienes de capital, del 1,2 por ciento. Es una dinámica lógica en un contexto de depresión de la industria y de la inversión privada.

En cambio, las importaciones de bienes de consumo crecieron 9,1 en nueves meses y 10,8 por ciento en septiembre. Medido en cantidades, sin tener en cuenta la variación del precio, las compras al exterior de bienes de consumo subieron el mes pasado 8,7 por ciento, lo que implica que creció el peso de los importados en el mercado local, que en el acumulado del año muestra una baja del consumo del 6,8 por ciento según datos de la CAME. Se trata de uno de los principales reclamos de los industriales locales, especialmente en el sector textil, calzado y línea blanca. El incremento de ese tipo de importaciones se explica por la mayor liberalización comercial que aplica el Gobierno desde diciembre.

De manera similar, en el sector automotor las importaciones en nueve meses muestran un incremento del 28,1 por ciento y del 23,3 por ciento en septiembre, que medido en cantidades implica un crecimiento del 24,9 por ciento. El avance de los autos importados es uno de los principales factores que alientan la mejora de los patentamientos locales, que según Acara acumulan una suba de 8,5 por ciento. Sin embargo, la actividad de las terminales locales continúa en baja.

Por el lado de las exportaciones, la merma en el año es del 1,6 por ciento y del 2,4 por ciento en septiembre. El flojo desempeño del mes pasado se explica por el rubro manufacturas de origen agropecuario, que cayeron un 16 por ciento. A nivel de productos, se registraron menores ventas de grasas y aceite de soja a China, India e Irán. Las manufacturas industriales crecieron 12,1 por ciento interanual, impulsadas por las de la industria minera, que subieron 23 por ciento. Las ventas del productos primarios aumentaron 2,4 por ciento y las de combustibles y energía, 27 puntos, sobre valores bajos.

En el comercio con Brasil, el saldo del mes pasado registró un déficit para la Argentina de 356 millones de dólares, frente al rojo de 218 millones del mismo mes del año pasado. Las exportaciones al país vecino cayeron 14 por ciento, mientras que las compras subieron 1,2.

Fuente: Página 12