Conflicto salarial en Bariloche: preocupan los daños colaterales
21/11/2014 SINDICATOSEl gremio admite que el vínculo con el gobierno se deterioró. La asamblea se debate este viernes entre aceptar el plus otorgado o retomar la retención de servicios.
El otorgamiento de una mejora salarial no remunerativa a los trabajadores municipales sin acuerdo del Soyem le permitió a la intendenta María Eugenia Martini salir de una negociación que parecía girar en redondo, pero al costo de deteriorar aun más un vínculo que ya no volverá a ser como antes.
«La relación se complicó mucho en el último tiempo, la gente está disgustada -dijo ayer el secretario adjunto del gremio, Juan Fuentes-. Pero el diálogo, aunque sea tenso, no se puede romper».
El dirigente describió así el clima que reinará en los contactos entre las partes a fin de avanzar con el preacordado pase a planta de 500 contratados y también en la paritaria para la pauta salarial del próximo año.
El Soyem realizará este viernes desde las 8 una asamblea que pasará revista al desenlace del conflicto y definirá los pasos a seguir.
Varios municipales vaticinaron que el pago de una suma uniforme de 1.500 pesos en diciembre y otra de 2.000 a comienzos de febrero, tal como lo resolvió Martini, resultará aceptado. Pero también podrían surgir propuestas para retomar la retención de servicios.
Una de las fuentes consultadas, que no integra la conducción del gremio, admitió que «hay que darle un corte definitivo» a la pulseada por el plus salarial y consideró que no existe determinación entre los municipales para sostener una medida de fuerza.
La decisión del Soyem de realizar asambleas en horario de trabajo son tomadas de hecho como una señal de hostiliidad, ya que paralizan buena parte de las áreas del municipio y ya fueron cuestionadas por el gobierno con presentaciones ante la secretaría de Trabajo.
Martini dijo que el aumento de suma fija comprometido por resolución es lo máximo que pueden pagar «sin afectar la operatoria comunal». La intendente buscó preservarse, no participó de la negociación con el gremio, pero terminó por firmar el aumento que en un principio también consideraba inviable.
Abonar las dos sumas fijas le demandará al municipio un desembolso de 6,3 millones de pesos. El gremio pedía otro pago intermedio en enero de 1.500 pesos, que representaba un gasto extra de 2,7 millones de pesos.
Aun en el caso de que el conflicto se aplaque a partir de hoy, el diálogo quedará afectado, reconocieron desde ambos sectores.
La toma de decisiones por parte del Soyem en asambleas multitudinarias fue destadada como un saludable ejercicio democrático, pero desde el gobierno de Martini lo cuestionaron por su imprevisibilidad. También la conducción del gremio pareció incómodo con ese mecanismo, cuando sus propuestas fueron superadas y quedó en evidencia «la ausencia de plan B».
Un municipal con varios años de experiencia dijo que «hasta ahora el vínculo fue con Natapof y Medrano (por el secretario de Gobierno y el asesor letrado municipal), y tal vez el camino sea abrir un canal de diálogo directo con Martini».
Fuentes, en tanto, dijo que los días por venir no serán fáciles «porque el municipio antes de fin de año debe compensar 26 millones de pesos de fondos específicos, tiene 4 millones de deuda con Afip por impuesto a las ganancias, hay atraso en el pago de becas y programas y también con muchos proveedores».