Córdoba: el 20% de las familias se quedó sin alimentos y el 30% pasó hambre

Lo dice un relevamiento del Centro de Almaceneros, que agrega que, por la falta de plata, se profundiza saltear comidas (hay padres que no comen para que se alimenten sus hijos) y que las meriendas pasan a ser cenas

Lo dice un relevamiento del Centro de Almaceneros, que agrega que, por la falta de plata, se profundiza saltear comidas (hay padres que no comen para que se alimenten sus hijos) y que las meriendas pasan a ser cenas

En Córdoba, el 20% de las familias se queda sin alimentos y el 30% pasa hambre, una situación que se viene agravando desde hace meses, a raíz del ajuste.

Lo dice el relevamiento social del Centro de Almaceneros de Córdoba, que agrega que, por la falta de plata, se profundiza el salteo de comidas (hay padres que no comen para que se alimenten sus hijos) y que las meriendas pasan a ser cenas.

Además, 9 de cada 10 hogares vulnerables no se alimentan bien, es decir que tienen déficit alimentario.

El estudio refleja que casi el 60 por ciento de las familias cordobesas no pudo acceder a la totalidad de los alimentos que conforman la Canasta Básica Alimentaria y que de aquellos hogares que sí pudieron acceder de manera total a la CBA sólo el 25% pudo hacerlo con recursos propios, mientras que el 75% restante debió ser asistido con algún tipo de ayuda estatal.

Los datos más dramáticos de la encuesta relevan que el 10%, por falta de recursos, algún integrante de dichos hogares sólo comió una vez al día o dejó de comer todo un día y que el 20% señaló que, alguna vez durante el mes de junio del 2024, su familia se quedó sin alimentos.

Los datos reflejan además que el 30% expresó que algunos de sus integrantes, sintió hambre pero no ingirió alimentos y que ya en la mitad de los hogares de la provincia algunos de sus miembros dejaron de desayunar, almorzar, merendar o cenar.

“En algunos hogares, cada vez se merienda más a la noche para que se parezca a una cena y así poder terminar el día”, dicen en el Centro de Almaceneros.

Yreflejan además que el 30% expresó que algunos de sus integrantes, sintió hambre pero no ingirió alimentos y que ya en la mitad de los hogares de la provincia algunos de sus miembros dejaron de desayunar, almorzar, merendar o cenar.

“Hay padres y madres de familia que dejan de comer para que se puedan alimentar sus hijos”, cuentan en Almaceneros.

Por último, en los hogares vulnerables, 9 de cada 10 grupos tienen déficit alimentario.

Por último, en los hogares vulnerables, 9 de cada 10 grupos tienen déficit alimentario.

Fuente: Puntal