Crearán el Registro Nacional de enfermedades cardiovasculares
15/10/2014 El País
El registro, el primero en su tipo, reunirá datos de pacientes que sufrieron un infarto agudo de miocardio para conocer cómo fueron atendidos y tratados y cuáles son las tasas de mortalidad. Será anunciado el jueves en la apertura del 40 Congreso Argentino de Cardiología, uno de los más destacados del mundo.
El registro, que será además el primero en Latinoamérica y se realizará en forma conjunta entre el Ministerio de Salud de la Nación, la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC) y la Federación Argentina de Cardiología (FAC), involucrará en una primera etapa a unas 400 instituciones de baja y alta complejidad de todo el país, que serán capacitadas para recibir y registrar datos como tiempos de demora en arribar a la unidad coronaria, diagnóstico y tratamiento indicados de manera uniforme.
«La firma del convenio es un hecho histórico. Este registro nacional permanente de enfermedades cardiovasculares para el monitoreo de políticas públicas medirá inicialmente el IAM, porque representa una patología aguda en la que todas las medidas deben tomarse en el tiempo adecuado para mejorar la sobrevida del paciente», dijo a Télam Carlos Tajer, presidente de la SAC.
El también presidente del comité organizador del congreso precisó que desde el organismo que dirige se llevan adelante registros desde hace más de 20 años, lo que les permite saber cuántos infartos se tratan, qué características tienen y los tiempos de demora.
«Pero no utilizamos esa experiencia para hacer intervenciones donde vemos una falla, por lo que asociarnos a la cartera sanitaria sí nos va a permitir intervenir», destacó.
Los datos, que se recabarán a través de un programa informático online que se compatibilizará con el Sistema Integrado de Información Sanitaria (SISA) de la cartera sanitaria, aportarán información que permitirá tener resultados para mediados de 2015.
«Es fundamental generar datos propios que surjan de las pequeñas y grandes ciudades de la Argentina sobre el IAM, que junto con el ataque cerebral (ACV) constituyen la expresión más agresiva de las enfermedades cardiovasculares, responsables de aproximadamente 100.000 muertes por año en nuestro país», aseguró Gustavo Cerezo, vicepresidente de la FAC.
Las enfermedades cardiovasculares son la causa más frecuente de mortalidad en el mundo y también en la Argentina. Según datos del Ministerio de Salud, en 2011 representaron el 30 por ciento de todas las muertes del país, por encima del cáncer (19 por ciento), las enfermedades respiratorias (15.6 por ciento) y las enfermedades infecciosas (4 por ciento).
«La colaboración entre esta cartera y las sociedades científicas cardiológicas en el lanzamiento e implementación del registro contribuirá a mejorar la calidad de atención en esta patología, que constituye la principal causa de muerte en nuestro país», apuntó Daniel Ferrante, coordinador del Programa Nacional de Enfermedades Cardiovasculares del Ministerio.
Ferrante agregó que durante el congreso se presentarán también los resultados de la tercera Encuesta Nacional de Factores de Riesgo realizada por esa cartera, «cuyos resultados indican un incremento del sobrepeso y la obesidad, una reducción del consumo de tabaco y un mayor acceso a la atención primaria con mayor detección y tratamiento de factores de riesgo cardiovasculares», subrayó.
El congreso, que finalizará el sábado, convocará a unos 10 mil profesionales de la salud nacionales e internacionales y se realizará en La Rural, avenida Sarmiento 2704, Ciudad de Buenos Aires.
Entre las múltiples actividades que ofrecerá a lo largo de tres días la SAC lanzará la «Historia clínica virtual», una iniciativa que relevará datos estadísticos en el país y que aportará datos para mejorar la calidad de vida de los pacientes, subrayó Tajer.
Para lograr la reducción de la mortalidad en el IAM es necesario que el paciente acceda a un centro de alta complejidad que permita la apertura de su arteria coronaria ocluida en el menor tiempo posible, que según precisaron los especialistas «sólo será exitosa y reducirá la morbimortalidad si se ejecuta en menos de 90 minutos».
«El tiempo promedio desde que el paciente empieza con síntomas hasta que llega a la institución es de entre dos y tres horas. En Capital Federal vemos que las ambulancias llegan rápido pero cuando el paciente llega al hospital, se enlentece. El objetivo es que la iniciativa funcione además como un organizador general, porque cuando el hospital sabe que hay un registro para infartos el médico se organiza mejor ante la sospecha», sostuvo Tajer.
Juan Gagliardi, secretario del comité organizador del congreso, apuntó que el registro comenzará con el infarto de miocardio, pero que luego «la idea es incluir a toda la patología cardiovascular».
«Es la primera iniciativa de estas características en Latinoamérica, trabajo que sí se realizó en los países del primer mundo, donde se logró bajar notablemente las tasas de mortalidad por enfermedad cardiovascular», precisó.