Crece el escándalo en la Intendencia de Victoria

La crisis institucional que vive la ciudad de Victoria parece lejos de resolverse.

La crisis institucional que vive la ciudad de Victoria parece lejos de resolverse. La denuncia por supuestas maniobras para evadir el pago de la tasa comercial por parte del viceintendente del Pro, Alcides Risso, generó un distanciamiento con el intendente radical, Domingo Maiocco, y un malestar generalizado en el gabinete del gobierno municipal de Cambiemos.

Tanto el intendente como su vice dieron una conferencia de prensa. Primero habló Risso, con Maiocco como espectador de gesto adusto, y después lo hizo Maiocco, con Risso mirándolo fijamente. Entre ellos no cruzaron palabra. En realidad la conferencia de prensa pareció una forma en la que ambos intentaron sacarse de encima la responsabilidad por lo ocurrido, pero sin arriesgar definiciones.

Cabe recordar que el municipio de Victoria impulsó el cobro de la tasa de Seguridad, Higiene y Profilaxis a las inmobiliarias. Luego de una serie de acciones judiciales, el municipio resultó favorecida y quedó en condiciones de exigirle el pago a todos los corredores inmobiliarios de la ciudad. Pero uno de ellos, uno de los más importantes, no pagó y recurrió a una argucia: se inscribió en la Municipalidad como si su actividad en el rubro fuera sólo de dos meses, cuando en realidad opera desde hace al menos seis años. Ese corredor inmobiliario, según la denuncia del abogado Carlos Reggiardo, es el viceintendente Risso.

Reggiardo impulsó la denuncia ante el Concejo. Según Reggiardo, es público y notorio que Risso abrió su inmobiliaria en 2010, que la inscribió en julio de 2016 y si bien no tiene deuda, señaló que existe una grave incongruencia entre lo que declara y ha pagado y la fecha real, habiendo falseado datos para pagar sólo dos meses de esa tasa.

¿Falsificación de firma? La semana pasada, tras que Reggiardo ingresara una nueva nota al Concejo, desde el municipio se emitió un comunicado indicando que Risso no tenía ninguna deuda. Y ahí surge un nuevo escándalo.

«Se informa a los contribuyentes que el presidente del Concejo no posee deudas con el municipio, tampoco la sociedad de hecho que comparte con su hermano con fines inmobiliarios», decía el texto firmado por el intendente Maiocco, pero luego se supo que Maiocco no firmó ese comunicado. O al menos, dice que no lo firmó.

Hubo pedidos de renuncia del viceintendente por parte de ediles opositores y, en privado, de ediles oficialistas. Apenas estalló la bomba de la supuesta firma adulterada, Maiocco viajó a Buenos Aires.

«Mi idea no era ocultarme de los medios, sino aclararlo, pensaba hacerlo el miércoles, pero a pedido del intendente lo hago ahora», dijo Risso, quien reconoció una «falencia ética», en su accionar. «Rechazo enérgicamente las versiones de que le falsifiqué la firma al presidente municipal», acotó Risso.

La situación le presenta al intendente la posibilidad de «sacarse de encima» al vice molesto, dicen.

Fuente: La Capital Rosario