Qué es y cuánto suma la deuda con la que la oposición deja en falta al intendente de La Plata y a Vidal
Ambas administraciones se comprometieron a cumplir con el pago de una deuda millonaria, bajo la premisa de diferenciarse de la gestión anterior. Pero dos años más tarde, Vidal no paga y Garro no reclama.
Ambas administraciones se comprometieron a cumplir con el pago de una deuda millonaria, bajo la premisa de diferenciarse de la gestión anterior. Pero dos años más tarde, Vidal no paga y Garro no reclama.
Unos 650 millones de pesos en concepto de servicio de alumbrado, recolección de residuos, ocupación del espacio aéreo, estacionamientos, riego y varios otros ítems sustentan un histórico reclamo de parte de la Municipalidad de La Plata al Gobierno provincial, sorpresivamente acallado durante los últimos años.
Se trata de la Tasa de Capitalidad que la ciudad le “cobra” a la Provincia como contraprestación de los servicios que le presta a los edificios públicos bonaerenses. La deuda se acumuló durante el último tramo del gobierno de Daniel Scioli y continuó en el primer año del de María Eugenia Vidal.
Pero a fines de 2016, ambas administraciones parecieron dispuestas a cortar de plano con la situación de morosidad. Entonces, el intendente Julio Garro y el ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, rubricaron un acuerdo mediante el cual se iba a abonar gradualmente la deuda contraída, empezando con un pago de 25 millones.
“Recuperamos algo que merecíamos desde hace mucho tiempo y son cerca de 240 millones de pesos que significarán más obras y oportunidades para cada platense”, declaró para la ocasión el Jefe Comunal platense, que emparentó la rúbrica con una “muestra del compromiso que tiene la provincia con el crecimiento la ciudad” y del trabajo conjunto con “la gobernadora María Eugenia Vidal y todo su gabinete”.
Si bien esa primera cláusula se cumplió, Vidal no volvió afrontar los pagos la deuda, que sumó otros 200 millones en 2017. Para 2018 se prevé que crezca otros 208 millones, totalizando unos 650 millones que Garro y su equipo incluyeron entre los ingresos a percibir a lo largo de este año pero que, por ahora, no reclamó.
La cifra implica nada menos que el 10 por ciento de los recursos que planea percibir por todo concepto. Claro que el panorama para La Plata, y para el resto de los municipios que adhirieron al pacto fiscal, especialmente las que gestionan “en déficit”, habida cuenta de que impide aumentar los presupuestos u obtener ayudas económicas provinciales y nacionales.
Ahora, además del costo económico de no haber reclamado a Vidal y compañía el pago de la deuda, Garro afrontará el costo político, ya que la oposición parece haber tomado la iniciativa y le demanda al alcalde platense que intime a la Provincia para lograr el recupero de esos millones.
