Cuánto vale cada cordobés, un cálculo muy dispar
¿Cuánto recibe cada cordobés por la coparticipación de impuestos? Si fuera un sistema parejo para todos por igual, cada uno de los 427 intendentes y jefes comunales debería administrar 3.910 pesos por vecino.
¿Cuánto recibe cada cordobés por la coparticipación de impuestos? Si fuera un sistema parejo para todos por igual, cada uno de los 427 intendentes y jefes comunales debería administrar 3.910 pesos por vecino. Pero los datos demuestran que el esquema a través del cual se establece el reparto de dinero de la Provincia hacia los municipios no lo es.
La zona geográfica, el movimiento migratorio que la afecta y la bandera política que enarbola cada cacique local terminan por definir cuánto vale cada habitante.
En los extremos están los vecinos capitalinos y los habitantes de un pequeño caserío del departamento San Justo, Colonia Iturraspe: mientras que a cada uno de los 1.329.604 habitantes que viven en la capital provincial les correspondieron 2.913 pesos, a los seis vecinos que según el último censo nacional habitan en el pueblito del este cordobés les habrían tocado 242.578 pesos per capita.
Los números son estimativos, puesto que para este informe se tomó como referencia la ejecución presupuestaria del tercer trimestre de 2017 (hasta el 30 de septiembre del año pasado), último dato informado por la Provincia.
Según ese documento, se distribuyeron 12.939 millones de pesos, pero la proyección de todo el año lleva esa cifra a unos 18 mil millones de pesos.
El grueso de los giros que la Provincia realiza a los municipios está fijado en una fórmula que se desprende de la ley provincial 8.663. Pero otros 600 millones se distribuyeron de manera discrecional durante el año pasado. Se trata de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), que envía la Nación, y el Fondo de Emergencias y Desequilibrios, que distribuye el Gobierno provincial en la Mesa Provincia-Municipios.
Esta última partida les entregó 122,5 millones de pesos para atender emergencias financieras. De esos fondos que distribuye la Provincia, los municipios de Unión por Córdoba (donde vive el 25 por ciento de los habitantes de la provincia) se llevaron el 63 por ciento: 77,7 millones de pesos. A los municipios administrados por el radicalismo le correspondieron 25,8 millones de pesos, 21 por ciento. Todos los datos corresponden a la Ejecución Presupuestaria del tercer trimestre de 2017.
La ciudad que más asistencia para desequilibrios recibió fue Mina Clavero (6,2 millones de pesos), en manos del PJ. En segundo lugar, aparece Villa Dolores. La intendenta de esta localidad, Gloria Pereyra, obtuvo una asistencia de 4,5 millones de pesos. Es la hija del exintendente Juan Manuel Pereyra, otrora referente del kirchnerismo en el oeste provincial. Pero ahora ella es una aliada del PRO. De la Nación, Pereyra (hija) recibió un Aporte del Tesoro Nacional (ATN) por otros 4,5 millones de pesos.
“Al recibir los fondos, la Nación no pide nada a cambio a nivel político. Era al revés con el kirchnerismo, que más le daba a sus aliados, como ocurrió con Villa María”, dice a La Voz Gloria Pereyra.
La discrecionalidad se aplica en un sentido inverso al del Fondo de Emergencias y Desequilibrios cuando se trata de los ATN, que distribuye el Ministerio del Interior entre los municipios.
En este caso, las localidades gobernadas por el PRO de Mauricio Macri recibieron 262 pesos por cada uno de los 130.746 vecinos que habitan las siete localidades amarillas en la provincia.
En cambio, los aliados del Presidente en Cambiemos, los radicales, recibieron 116,4 pesos por cada uno de sus vecinos, que suman 1.946.888 en estos municipios (la mayoría, en la ciudad de Córdoba: 1.329.604).
En términos globales, a los jefes comunales peronistas les fue un poco mejor que a los radicales en el reparto de ATN: recibieron casi 174 pesos por habitante. El río revuelto de la grieta dejó (otra vez) a los jefes comunales kirch-neristas en el mejor de los mundos: en el medio de la cincha. Los vecinos de comunas K recibieron ATN por 213,30 pesos per cápita.
Una copa millonaria
El grueso de los giros de dinero hacia municipalidades y comunas se integra con la coparticipación provincial y tres fondos: el Fondo de Financiamiento para la Descentralización (Fofindes), el Fondo Anticrisis y de Saneamiento (Fasamu, para rescate de títulos de deuda emitidos durante la crisis de 2001-2002) y el Fondo Solidario Federal (que distribuye la Nación, por las exportaciones de soja).
Siguen una fórmula de distribución fijada por la ley 8.663: un 21 por ciento entre todos los municipios por partes iguales y 79 por ciento según la cantidad de habitantes. Para las comunas, la fórmula es 50 y 50: mitad entre todas las jurisdicciones y mitad según los vecinos que las habitan. El resto de la torta se integra con los dos fondos explicados más arriba.
Hasta el 30 de septiembre del año pasado, los municipios y comunas habían recibido un total de 12.938.915.501 pesos. De ese monto, 78,5 por ciento correspondió a la coparticipación; 16 por ciento, a los tres fondos ya mencionados y 4,5 por ciento a los ATN y al Fondo de Emergencia y Desequilibrios. Entre estas dos partidas, la de los ATN es la que más pesa: representa 79 por ciento de los fondos que se distribuyen sin criterio objetivo.
Al analizar el monto que cada vecino de la provincia recibe, surge que los menos beneficiados son los capitalinos: 2.913 pesos per cápita, mil pesos menos que el promedio provincial de 3.910 pesos por vecino. Es una paradoja: a la ciudad le ingresa la partida más alta por coparticipación, más de 3.800 millones de pesos hasta el 30 de septiembre de 2017, cifra que al dividirse por los 1.329.604 de vecinos arroja esos 2.913 pesos.
Algo similar ocurre en las ciudades de Río Cuarto, Villa María, Río Tercero, Carlos Paz, San Francisco y Alta Gracia, por mencionar las principales que están por debajo del promedio provincial. Estos intendentes recibieron en el período analizado entre 3.105 y 3.368 pesos por cada habitante.
En contrapartida, los seis vecinos que según el censo nacional habitan Colonia Iturraspe, en el departamento San Justo, son los más beneficiados en la distribución per cápita por el actual reparto de fondos coparticipables: el jefe comunal Abel Binner recibió por cada uno de ellos 242.578 pesos. O los ocho habitantes de Colonia Anita, también en San Justo: Sergio Beltramino administró 230.890 pesos per cápita.
En diálogo con este diario el ministro de Gobierno, Carlos Massei, defendió el esquema actual, aunque admitió que existen “situaciones irracionales”.
Las desigualdades se repiten. El intendente kirchnerista de Las Higueras, por ejemplo, recibió (los tres primeros trimestres de 2017) por cada uno de sus 6.200 vecinos 4.790 pesos. En cambio, el intendente peronista de Devoto, 5.542 pesos por cada uno de los 6.133 habitantes del pueblo. Y el radical que comanda Balnearia, 5.474 pesos por cada uno de los 6.171 vecinos. Las tres localidades están enclavadas en zonas de similar desarrollo, con 4,5 por ciento de hogares con necesidades básicas insatisfechas.
El jefe comunal de Anisacate, el kirchnerista Ramón Zalazar, protesta porque recibe 6.289 pesos por cada uno de los 3.350 vecinos del pueblo, mientras que a la vecina localidad de Corralito, distante a 62 km y administrada por Unión por Córdoba, tuvo giros por 9.716 pesos/vecino. Un pueblo más próximo a Anisacate, Toledo, a 61 km y en manos de Unión por Córdoba, recibió 5.607 por vecino.
