El PBI caerá 9,1% este año en la región y la pobreza alcanzará al 37,3% de la población
Para la Argentina, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe proyectó una contracción del PBI de 10,5% y un incremento en la pobreza de 10,8% en 2020, al pasar del 26,7% al 37,5%.
16/07/2020 EL MUNDOPara la Argentina, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe proyectó una contracción del PBI de 10,5% y un incremento en la pobreza de 10,8% en 2020, al pasar del 26,7% al 37,5%.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) estimó este miércoles que el Producto Bruto Interno (PBI) de la región caerá en promedio 9,1% este año y que habrá 45,4 millones más de pobres, con lo que la pobreza alcanzará a 230,9 millones de personas, equivalentes al 37,3% de la población.
La Cepal proyectó para Argentina una contracción del PBI de 10,5% para este año y un incremento en la pobreza de 10,8 puntos porcentuales respecto a 2019, al pasar del 26,7% hasta el 37,5%.
A través de una videoconferencia, la secretaria ejecutiva de CEPAL, Alicia Bárcena, presentó el Informe Especial Covid-19 n°5, en el que se reajustaron las proyecciones del documento anterior.
Por subregiones, la entidad estimó que el nivel de actividad económica caerá en 2020 9,4% en América del Sur; 8,4% en América Central y México, y 7,9% en los países del Caribe, excluyendo Guyana.
Respecto a la pobreza extrema en la región, el número se incrementaría en 28,5 millones, pasando de 67,7 millones de personas en 2019 a 96,2 millones en 2020, equivalentes al 15,5% del total de la población.
La desocupación llegaría al 13,5%, afectando a 44 millones de personas, según las estimaciones de la Cepal.
En términos globales, se prevé una contracción del PBI del 5,2%, con resultados negativos en el 90% de los países del orbe.
América Latina tendrá la peor contracción en los últimos 100 años” ALICIA BÁRCENA
La magnitud de la crisis es tal, que el organismo dependiente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) estableció que el PBI regional per cápita en 2020 estará en los mismos niveles que tuvo en 2010.
Por otro lado, el comercio de bienes a nivel mundial se contraerá un 32% de acuerdo con datos de la Organización Mundial de Comercio (OMC), situación que producirá un desplome de las exportaciones de América Latina de hasta el 23%.
En consonancia, la baja en los precios de las materias primas afectará en forma negativa los términos de intercambio entre la región y el resto del mundo.
Otro de los ítems analizados tiene que ver con el aumento de la desigualdad, que incrementará el Índice de Gini en un promedio regional de 4,9 puntos porcentuales.
“Ocho de cada diez personas en la región (491 millones de ciudadanos) vivirán con ingresos por debajo a 3 líneas de pobreza; es decir, subsistirán con ingresos menores a US$ 500”, sostuvo Bárcena.
Para hacer frente a la crisis
El trabajo presentado hoy sugiere cuatro líneas de acción para enfrentar la crisis generada por la pandemia del coronavirus.
En primer lugar, sostener un Ingreso Básico de Emergencia (IBE) con un costo calculado en torno al 2% del PBI en caso de aplicarse por seis meses, y del 3,6% si se otorga por nueve períodos.
Como segunda medida, propone un bono contra el hambre equivalente al 70% de una línea regional de pobreza extrema (67 dólares en 2010) y cuyo costo fiscal se recalculó en US$ 27.100 millones, equivalente al 0,52% del PBI regional.
Este año, la región sumará 28,5 millones de pobres.
En tercer lugar, la Cepal llamó a los países a apoyar a las empresas a través de iniciativas como la postergación o cancelación de los pagos de impuestos; la suspensión del pago de los servicios; la flexibilización y mejora de las condiciones de crédito; o el cofinanciamiento de la nómina salarial, entre otras.
El documento indica que “los efectos de la crisis llevarían al cierre más de 2,7 millones de empresas formales en la región, con una pérdida 8,5 millones de puestos de trabajo”.
Por último, Cepal remarcó la importancia de acceder a financiamiento internacional en condiciones favorables, mediante la emisión de Derechos Especiales de Giro (DEG) y de líneas especiales de crédito a bajo costo y mayores plazos.
Asimismo, pidió el compromiso de la comunidad internacional para capitalizar a entidades financieras regionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) o el Banco de Desarrollo de América Latina-CAF.
Bárcena consideró que “es el Estado el que está resolviendo esta crisis y el que tiene el rol más importante; las políticas fiscales y monetarias deberán ser expansivas y sostenerse en el tiempo”.