Elecciones en el Sindicato de Municipales de Rosario
Masiva abstención de los afiliados que se negaron a convalidar una dirigencia desprestigiada
01/09/2022 SINDICATOSSobre 14.800 trabajadores y trabajadoras empadronados para votar, el oficialismo obtuvo apenas 4.200 votos. Más del 70% no respaldó a los actuales dirigentes. Una crisis de representación ganó a la histórica conducción devenida por el fallecido de Néstor Ferraza, y hoy representada por Antonio Ratner, actual Secretario Adjunto de la Confederación de Trabajadores Municipales de Argentina (CTM Moyanista) manejada por Rubén “Cholo” García.
La poca participación de los trabajadores estuvo impulsada, entre otras cosas, por la evidente confirmación de una “lista opositora” del propio riñón del oficialismo para lograr sostener un triunfo fabricado.
Entre los “festejos” sorprendió la participación de dirigentes de la otra central de trabajadores municipales (COEMA) alineados en Juntos X El Cambio y la ausencia de todo el arco político sindical de Rosario, incluso de otros gremios municipales de esa provincia.
Un importante deterioro en los salarios como consecuencia de la falta de aplicación de la paritaria provincial, la existencia de amplios sectores condenados a la informalidad laboral y el traslado de aportes patronales al sueldo de los activos generaron un importante malestar entre los afiliados que eligieron la abstención como respuesta a la lista encabezada por Ratner.
Un sinnúmero de “anomalías” generan este rechazo a la conducción: No sólo amigos y parientes en números escandalosos integran la plantilla municipal en altos cargos, sino también la participación en el Sindicato de asesores legales vinculados con la mafia rosarina y a Leonardo Peiti, el empresario que extendió por toda la provincia de Santa Fe una red de casinos clandestinos. Otros hechos irregulares como el armado de cooperativas truchas que facturaban para la Municipalidad de Rosario y las dudas sobre la compra de un hotel en Mar del Plata -que derivó en varios allanamientos a la entidad sindical- muestran el nivel de desprestigio que alcanza a la conducción del gremio votado por menos del 30% de los trabajadores.