En Concepción entregarán alarmas a los vecinos para frenar la inseguridad
EN EL HALL. Morelli muestra la falta de espacio para hacer la rampa.
“Cada uno tendrá su botoncito y podrá activarlo para solicitar ayuda cuando lo necesite”, indicó el jefe municipal El intendente Morelli aseguró que la vigilancia es tarea de la Policía, pero busca una solución ante las quejas
La oficina del intendente de Concepción, Osvaldo Morelli, tiene las ventanas cerradas. Sobre su amplio escritorio hay unas carpetas gordas. Según detalla él, en ellas está un gran plan de canales de desagües para la “Perla del Sur”. También hay papeles sobre distintos pedidos y un informe policial acerca de los procedimientos que la fuerza realizó en los últimos meses. Durante la entrevista con LA GACETA, que se extendió más de una hora, admitió que la seguridad es uno de los aspectos de la ciudad que más le preocupa. Dejó en claro que ese tema que compete a la Policía de la Provincia. Pero sostuvo que, ante las quejas constantes de los vecinos (en los últimos meses hubo reiteradas marchas para exigir más vigilancia en un municipio que registra robos y arrebatos todos los días), está desarrollando un programa para ayudar a la gente a protegerse.
– ¿De qué se trata el nuevo programa municipal que tendrán para prevenir delitos?
– Tenemos la idea de hacer un programa nuestro de atención a los vecinos, que incluya la entrega de botones antipánico. Podemos empezar a trabajar por barrios. Ya pedimos presupuesto para comenzar a comprar y a entregarles a los vecinos los botones para que trabajen en forma vecinal, por cada manzana. Cada uno tendrá su botoncito y podrá activarlo para solicitar ayuda cuando lo necesite.
– ¿Las alarmas estarán en contacto con la Policía?
– Se trata de un trabajo que se hará desde la Municipalidad para que los vecinos se ayuden entre ellos cuando suene la alarma. El municipio debe estar al lado del vecino. Si bien de la problemática de la seguridad la responsable es la Policía, nosotros tenemos que trabajar en este tema. La gente se queja mucho; hay zonas muy cuestionadas. Entonces, hay que acercarse y ayudar.
– ¿Es cierto lo que denuncian los vecinos, que algunas cámaras de seguridad instaladas en las calles no funcionan, que no fueron tan efectivas en Concepción?
– Algunas cámaras no funcionan pero eso lo maneja la Policía. Yo les dije que están muy bajas; ellos dicen que es suficiente para lo que tienen que ver, pero teniendo un vandalismo del nivel que hay las rompen porque están bajitas. Ese es mi punto de vista.
– ¿Piensa que Concepción necesitaría más comisarías, teniendo en cuenta el crecimiento poblacional que tuvo?
– Nosotros donamos tierras en el barrio Municipal para que se haga una comisaría en este sector, que es muy populoso. Espero que se pueda hacer algún día; todavía no la han hecho. También les cedimos una casa en el barrio Primero de Mayo donde funciona la Policía Motorizada. Y en el barrio San Andrés está la Brigada (de Investigaciones). La ciudad creció mucho, pero ellos (los policías) tienen otra visión: dicen que al tener la noticia de un problema salen con motos y autos y llegan a cualquier lugar porque la ciudad es chica. Ellos se manejan con esa idea, pese a los reclamos de los vecinos. Yo también soy uno de los expuestos cuando entro el auto en mi casa. Vivo frente a la plaza (Haimes) y siempre hay gente en la zona y no sé quiénes son. Yo no tengo custodia.
¿Buenas relaciones?
No piensa igual que la Policía. Pero Morelli asegura que se lleva bien con los comisarios que se desempeñan en la ciudad. De hecho destacó que en diciembre del año pasado trabajaron en conjunto con los efectivos y así evitaron varios intentos de saqueos en la “Perla del Sur”.
No usa corbata. Viste camisa a rayas y chaleco azul. Su despacho parece más un estudio de arquitectura, con planos desparramados por todas las paredes. A los 69 años, Morelli, que fue cinco veces intendente de la segunda ciudad más importante de Tucumán, dice que se siente el menos político de todos los políticos. “Mi único título auténtico es el de arquitecto”, resalta. Dice que se siente cerca de la gente, que conversa todos los días con los vecinos. Admite que muchos lo critican. Y contesta con una mezcla de humor, ironía y dureza los reclamos de los concejales opositores.
– ¿Cómo reaccionó ante la intimación que le hicieron los ediles de la oposición porque no se aplica una ordenanza que exige la construcción de una rampa en el edificio municipal?
– ¿Qué intimación? Yo lo intimé a él (por el edil Eduardo Carrizo) porque no me puede venir a intimar a mí con una carta documento. Él no me puede ordenar qué hacer. Él es parlamento, debe parlamentar, o sea parlar sobre diferentes temas. Ellos (los concejales opositores) confunden que juegan el rol del Ejecutivo. Ya les contesté que una carta documento al intendente debe salir de todo el Concejo Deliberante.
– Se dijo que no construye la rampa por una cuestión política…
– No es una cuestión política. Estos chicos pueden gritar todo lo que quieran pero cuando yo tengo la verdad, la digo. Ellos quieren confundir a la población. Yo soy universitario y sé hacer una rampa. El espacio que tengo es reducido en el hall de entrada. No hay lugar para darle el desarrollo necesario. Este es un edificio viejo que hay que remodelar, o tal vez construir uno nuevo. Para que sea auténticamente una rampa, en la que persona pueda movilizarse independientemente, necesito un espacio que no hay. Hacerla con mucho desnivel no sirve. Después van a decir: “mirá el mamarracho que hizo este”. Buscaremos otra alternativa para solucionar el problema: pondremos un elevador o algo así. El tema es que un concejal no tiene que hacer proyectos de obra. Les dije: “muchachos, este es un tema que nosotros entendemos y ustedes no. Ustedes están para legislar, nosotros somos el ejecutivo. Esa ordenanza está mal hecha”.
– Recientemente dijo que esta es su última gestión, ¿a quién piensa apoyar para que sea candidato a seguirlo?
– Está mi hijo (Franco Morelli) en la carrera. Para mí fue una sorpresa. Nunca lo imaginé, nunca quise involucrar a mi familia en la política porque esto me significó mucho sacrificio en mi profesión, incluso tuve que cerrar mi estudio. Mi hijo me preguntó qué opinaba de su candidatura. Le dije que lo voy a ayudar; él está haciendo un análisis de las cosas, está viendo. No le tiene miedo, cosa que también me sorprendió.
– Se habla de que usted podría presentarse como legislador, ¿es cierto?
– (Se ríe) La fórmula Morelli-Morelli, ¿le gusta? La verdad que no sé. Mi fuerte es el municipalismo. Pero es mi hijo y si me proponen para legislador voy a pensarlo. Repito: no sé todavía.
– ¿Serán unas elecciones intensas? ¿Qué opina de las visitas que el intendente capitalino Domingo Amaya está haciendo a Concepción?
– Sí sé que estuvo visitando a otro arquitecto (Miguel Abboud). Hay muchos arquitectos que quieren ser intendente aquí. Es importante la competencia, la última vez ganamos lindo.
