Estación General Paz: el pueblo con más perros que habitantes
Viven 2.300 personas y hay más de tres mil canes. La tenencia irresponsable y el abandono de mascotas en la localidad, las principales causas.
En Estación General Paz hay 753 viviendas, 2.300 habitantes y más de tres mil perros.
Las dos primeras cifras se desprenden del Censo Nacional de Población y Hogares de 2010 y el restante, del registro que confeccionó la Asociación Salvar Hocicos en esa localidad del departamento Colón, 31 kilómetros al norte de la ciudad de Córdoba.
“Hicimos un relevamiento y nos sorprendimos con el promedio que arrojó: más de tres perros por casa, lo que no significa un problema en sí mismo; lo que nos preocupa es que la mayoría de ellos está en situación de abandono”, dice Romina Olivo, fundadora y titular de esa organización.
La Voz visitó el pueblo para corroborar la situación.
Al arribar al lugar, nos recibió un mestizo mediano que tiene “parada” en los silos a la vera de la ruta 9, en su intersección con Santiago del Estero, la calle principal de la localidad.
Estaba agazapado debajo de un cesto público de basura, desde donde partió en carrera alocada para interceptar el auto de los forasteros, ladrando con ferocidad junto a la rueda.
Por lo visto, el mastín callejero tiene el hábito de correr a cuanto vehículo pase, con evidente preferencia por las motos y las bicicletas. “Tengo que andar con mucho cuidado cuando llevo a mi hija al colegio en la motito, porque ‘el Bigotudo’ (así llaman los vecinos al vagabundo) a veces se nos viene encima y tenemos miedo de que nos tarasconee”, comentó Estela, mamá de una alumna de la Escuela José María Paz.
Detrás de la planta de acopio, en la franja de unos 400 metros que va desde la vieja estación del ferrocarril hacia el norte y el oeste de las vías, se ve un grupo de casas modestas. Allí los perros impresionaban como amos y señores del territorio. En general, lucen escuálidos y muy descuidados.
También en la plaza Provincias Unidas (dos cuadras al oeste de la ruta), los canes se mueven a sus anchas y en una de las ochavas de la manzana un trío de ‘cuscos’ toma baños de sol al mediodía. En tanto, un doberman y dos mestizos de talla media, sin dueños ciertos, montan guardia en la puerta de la subcomisaría del pueblo (frente al paseo), a la espera de que salga algún móvil policial para acompañarlo por detrás, como si fueran su sombra.
“Se ve que les encanta seguir a los patrulleros porque los ves con ellos por todas partes”, comenta Olivo.
Motivó especial preocupación la presencia de dos bóxer y un rottweiler sueltos paseando por la calle Catamarca. También, una jauría en un amplio descampado en la parte posterior de la localidad.
Causas de la proliferación
Oliva atribuye la proliferación de perros a dos causas principales: la reproducción sin control debido a la tenencia irresponsable de mascotas y al abandono “por parte de los que pasan por acá o vienen circunstancialmente”.
Puso como ejemplo lo que sucede en el hipódromo del pueblo. “Al menos una vez al mes hacen carreras de caballos en el Jockey Club (ubicado en el extremo noreste de la población). Esos días se llena de acampantes y, cuando se van, en el predio quedan muchos perros abandonados”, cuestionó la mujer con fastidio.
“Hace poco rescaté a un cachorro ciego que se había caído a la pileta”, apuntó Olivo.
“La mejor manera de abordar el tema es que todos los integrantes de la sociedad nos involucremos en la problemática y trabajemos en la protección de los animales”, concluyó la voluntaria.
“Hacemos lo que podemos”
El intendente de la localidad, Carlos Borgobello, reconoció la existencia del problema y lamentó no poder abordarlo “como corresponde”, por razones presupuestarias. “Hacemos lo que podemos”, resumió.
“Tenemos un veterinario que trabaja para la Municipalidad en vacunación y en la atención de algunos animales, pero con eso no alcanza”, aceptó. “Lo ideal sería contar con un refugio, una perrera e infraestructura para castraciones, pero eso supone costos elevados que no están a nuestro alcance”, asumió el mandatario.
Borgobello señaló que el presupuesto del pueblo es de 17 millones anuales y la prioridad de su gobierno es la salud. “Tenemos un dispensario que funciona las 24 horas, con ambulancia para traslados, sala de rayos, ecografías y profesionales de distintas especialidades. Lamentablemente, no podemos con todo”, concretó.
Minimizó el abandono de perros en el hipódromo (“Hay carreras cado dos meses”, dijo) y señaló como causa principal a los canes que dejan en la ruta 9 los “desaprensivos que pasan por allí”.-
“A este problema lo padecen muchos municipios de la provincia, sobre todos los que están cerca de la ciudad de Córdoba; salvo unos pocos, como Colonia Caroya, han logrado abordarlo bien”, finalizó el jefe político de Estación General Paz.
Castración gratuita
Ciudad de Córdoba. El Centro de Castraciones Municipal está ubicado en Santiago Cáceres 1885, barrio Cáceres.
Horarios. 7.30 a 20.Turnos. (351) 433 -3791; 152-006693. Lunes, martes, miércoles y viernes, de 9 a 13.
Correo electrónico. castracionescba@gmail.com
Quiénes. El Programa de Castraciones de Córdoba es llevado adelante por organizaciones sin fines de lucro que trabajan por los derechos de los animales, voluntarios independientes y la Municipalidad de Córdoba, con la colaboración de los usuarios del servicio.
Cómo dar en adopción
Hay varias alternativas para tener en cuenta cuando encontramos un animal callejero y no podemos tenerlo. Estos son algunos de los consejos del Programa de castraciones de Córdoba.
Entrega. Ir un domingo a la tarde con el animal a alguna plaza importante de su barrio. Llevar un cartelito con un buen mensaje, que cuente un poco su historia y sus virtudes. Para evitar un posterior abandono, tome los datos del adoptante y llame periódicamente para conocer el estado del animal.
Campañas. Participar en las campañas de adopciones que organizan los fines de semana distintos grupos proteccionistas. Existen en la ciudad de Córdoba al menos tres puntos donde se llevan a cabo estas campañas: Parque de las Naciones, Rotonda Rodríguez del Busto y Parque Las Tejas.
Rescate. Pegar carteles con un mensaje amistoso y foto –si tiene de antes y después del rescate del animal, mejor– en puntos estratégicos de su barrio.
Redes. Mandar e-mails a tus contactos, con un buen texto que describa al animal y fotos de antes y después. o postearlo en la página de Facebook de Patitas de Perros, entre otras entidades proteccionistas.
Contexto. Ante la aparición de un posible adoptante, indagar un poco acerca del medio en el que va a vivir el animal, para asegurarse de que estará en buenas condiciones.
Vacunas. Entregar al animal preferiblemente vacunado, desparasitado y castrado.
Niños. No dar cachorros a niños sin el consentimiento de un adulto responsable.
