Francisco recibe el cariño de su Latinoamérica

BOLIVIA PAPA
Horas emotivas se viven en Bolivia, donde el papa se reunió con el presidente Evo Morales y celebró una misa multitudinaria en la plaza del Cristo Redentor. Mientras tanto, Paraguay se engalana para la histórica visita del pontífice .

El papa Francisco comenzó su segundo día en Bolivia con la celebración de una misa multitudinaria en la plaza del Cristo Redentor, y por la tarde continuará con una reunión con los Movimientos Populares.

Francisco llegó ayer a Santa Cruz, después de la visita de cortesía al presidente Evo Morales y la reunión con la sociedad civil en La Paz, pero por motivos de salud ante el posible mal de altura se había decidido proseguir los actos en esta ciudad.

La misa dio también inicio al V Congreso eucarístico nacional y habrá oraciones en guaraní, quechua y aimara.

Francisco invocó ayer a mantener la unidad familiar, el respeto al medio ambiente e instó al diálogo y a soluciones compartidas por el mar a los gobiernos de Chile y Bolivia.

“Una tierra bendecida en sus gentes, con su variada realidad cultural y étnica, que constituye una gran riqueza y un llamado permanente al respeto mutuo y al diálogo”, dijo en su primera intervención en tierras bolivianas, después de aterrizar en el aeropuerto de El Alto.

El presidente boliviano, Evo Morales, abrazó al pontífice al recibirlo al pie del avión y colgó a su cuello una “ch’uspa” (una pequeña bolsa andina con hojas de coca en su interior).

A pesar de que El Alto se ubica a 4.100 sobre el nivel del mar, el papa Francisco no masticó las hojas de coca, que son utilizadas para mitigar los efectos del mal de altura. Sin embargo, según la televisora estatal Bolivia TV, el pontífice bebió te de coca en el avión que lo trasladó desde Ecuador, la primera parada de su gira sudamericana, que lo llevará luego a Paraguay.

Francisco, de 78 años, expresó en varias ocasiones afecto y mucho cariño por los bolivianos por el contacto diario que tuvo con los migrantes de esa nacionalidad cuando era obispo de Buenos Aires.

A su llegada a El Alto ratificó ese aprecio. “Llevo en el corazón especialmente a los hijos de esta tierra, que por múltiples razones han tenido que buscar otra tierra que los cobije, otro lugar donde esta madre los haga fecundos y posibilite la vida”, dijo ante la mirada de Morales.

El acto de El Alto, que duró 45 minutos, concluyó con “Jallalla” (salud, en aymara), la bendición del papa y un recuerdo a la Virgen de Copacabana, patrona de Bolivia.

Luego rindió homenaje póstumo al sacerdote jesuita Luis Espinal, asesinado hace 35 años por luchar por las libertades democráticas de los bolivianos. El pontífice hizo un alto en su recorrido por la autopista de 12 kilómetros que une las ciudades de El Alto y La Paz para rendir tributo religioso al fallecido sacerdote.

Tras una reunión privada en Palacio Quemado, en La Paz, el presidente Morales le entregó otros obsequios al sumo pontífice: un crucifijo de bronce, una casulla blanca de alpaca, el Libro del Mar, otro libro autobiográfico escrito por Iván Canelas y un cuadro de la Virgen del Socavón hecho con granos de quinua real.

Además se le confirió al ilustre visitante la máxima condecoración del Cóndor de los Andes.

El papa Francisco retribuyó con la entrega de la nueva encíclica “Laudato Si” sobre el cuidado del medio ambiente, que fue presentada por el Vaticano en junio.

Francisco es el segundo papa en pisar tierra boliviana en 27 años, después de que Juan Pablo II realizara una visita a seis ciudades del país en mayo de 1988.

El dato:  Increíble

El rumor está pero parece increíble. Se habla de algún posible desorden o actividad del Ejército Popular Paraguayo (EPP) durante la visita de Francisco en estas tierras. El fiscal general, Javier Díaz Verón, tuvo que reconocer los rumores pero manifestó que “no hay nada” y que la inteligencia de gobierno no registra actividad del grupo terrorista. Sin embargo admitió ante la prensa que si se llega a registrar algún hecho, se suspenderá la actividad del Papa y se evaluará cómo continúa la visita. Pero siempre, aclaró, “es una mera suposición”.

El papamóvil inseparable socio de Francisco

El papamóvil será un inseparable compañero en Paraguay del papa Francisco, quien desde mañana usará ese icónico vehículo para completar un circuito que le desplazará por diversos puntos del Gran Asunción y por la ciudad de Caacupé, la capital mariana del país.

Serán dos días y medio de una estancia en la que el papamóvil, diseñado por una empresa paraguaya bajo la supervisión del Vaticano y con un costo de 47.000 dólares, hará un total de 64 kilómetros.

Y es que el papa abordará esa camioneta el 10 de julio y apenas se despegará de ella hasta la tarde del 12, cuando deje Paraguay.

La primera vuelta la hará al poco de llegar al aeropuerto internacional de Asunción, donde le dará la bienvenida el presidente paraguayo, Horacio Cartes. Tras esa ceremonia, el papamóvil le desplazará hasta la Nunciatura, en un trayecto de unos 13 kilómetros durante los que será saludado por miles de personas apostadas en calles y avenidas del área metropolitana.

Luego de un descanso, el papamóvil llevará a Francisco por los casi cuatro kilómetros que separan la Nunciatura del Palacio de López, la sede de la Presidencia.

En ese emblemático edificio, construido a mediados del XIX, el papa se verá de nuevo con Cartes en una recepción en la que estarán presentes miembros del Gobierno y representantes del cuerpo diplomático.

Acabado el acto, el vehículo papal reposará hasta el sábado, cuando afrontará su “etapa reina”.

Esa mañana conducirá a Francisco hasta el Hospital Pediátrico Acosta Ñu,, donde el personal médico celebrará el acontecimiento lanzando miles de globos blancos y amarillos.

Francisco se separará luego del papamóvil, pero no por mucho tiempo.

En un auto cerrado será conducido a unos 48 kilómetros de Asunción, en concreto al alto llamado Cruz del Peregrino, donde ya le estará esperando su fiel papamóvil para el transbordo.

De nuevo en su interior, Francisco recorrerá 5,8 kilómetros hasta el Santuario de Caacupé, corazón del catolicismo paraguayo y del culto mariano en el país, y que ese día será una explosión de gente.

Después de la misa y de los honores a la Virgen de Caacupé, el papa regresará en coche a Asunción, dando una breve tregua al papamóvil, que será activado poco más tarde.

Esta vez será para rodar por las calles colindantes al polideportivo León Condou, donde Francisco mantendrá un encuentro con representantes de la sociedad civil, incluido el colectivo gay. Al terminar ese evento, el papamóvil paseará otros cinco kilómetros hasta la meta del día, la Plaza de la Independencia, en pleno centro histórico de Asunción, en la que se encuentra la estatua del fundador de la ciudad, el conquistador español Juan de Salazar.

Aquí, el papa recibirá la Llave de Oro de la Ciudad de manos del intendente, Arnaldo Samaniego, y después caminará hasta la vecina Catedral, donde presidirá las Vísperas en presencia de obispos, sacerdotes y más de 3.000 asistentes. La etapa final será el domingo, cuando el papamóvil enfile la Avenida Artigas para adentrarse en un terreno de piedra y barro que conduce al Bañado Norte, uno de los barrios pobres de Asunción pegados a la ribera del río Paraguay.

Tras una breve oración en una capilla y unas palabras en una modesta cancha de fútbol de ese barrio, Francisco montará de nuevo en el vehículo para ir hasta el parque de Ñu Guasúdonde oficiará una celebración eucarística.

Horas después, en la Costanera, el paseo fluvial de Asunción, se encontrará con millares de jóvenes.

De ahí saldrá hacia el aeropuerto, por supuesto en papamóvil, poniendo fin a una gira latinoamericana que le ha llevado antes por Ecuador y Bolivia.
análisis

Asunción mira hacia el cielo

Todos miran al cielo. El sol lucha por hacerse notar esta fría mañana. Muchos miran al cielo porque el clima parece que será un elemento principal durante la visita apostólica del Papa Francisco a Paraguay. Hace varios días que llueve y hoy parece ser una jornada donde habrá un respiro.

Y es que mucha gente recuerda la llegada de Juan Pablo II a Paraguay en 1988. Es más, un pequeño souvenir engalana el sector de arribos de la terminal aeroportuaria Silvio Pesttirossi. Una baldosa recuerda dónde “el papa viajero” pudo besar, finalmente, tierra paraguaya. Ocurrió que llovía de tal modo que cuando Juan Pablo se inclinó tras descender fue imposible. Además, un blooper: alguien puso una bolsa de plástico para que bese así el piso. Finalmente lo hizo puertas adentro y, como no podía ser de otra manera en estas latitudes, el aeropuerto pasó a ser el único en el mundo que fue besado por un papa.

Las imágenes de Francisco están por todos lados. Y si no hay bandera papal, la bandera del Paraguay sirve para demostrar el afecto que genera el ilustre visitante. Y los intereses se confunden porque más allá de la devoción que provoca la presencia del máximo representante de la Iglesia Católica, también están las otras expectativas, más mundanas.

El comercio anunció que abrirá sus puertas viernes, sábado y domingo, pese al feriado dispuesto por el gobierno paraguayo. Para los comerciantes no hay opción. Deben abrir. Es un mandato que tienen en la sangre y es la oportunidad de un “veranito” en pleno invierno.

Es que no sólo hace un poco (muy poco) de frío. En Paraguay la gran actividad comercial es el comercio y es sabido que argentinos y brasileños formamos parte sustancial de su vida económica. Por este motivo la devaluación que produjo Brasil en el real ha castigado duramente a la actividad. Tanto que Ciudad del Este está replanteando su futuro porque el tradicional intercambio cae en picada. Todos los días cierran entre 20 y 30 pequeños locales y se teme que seguirá así por un tiempo más.

Por eso, aunque el grueso de los argentinos cruce por Clorinda-Asunción, se especula con que un buen número lo haga por Ciudad del Este y que muchos brasileños que no pudieron estar en Río de Janeiro crucen ahora por este punto y la actividad tenga un pequeño repunte.

Todos miran al cielo. No solamente llegará a Asunción el representante de Pedro sino que lo hará un papa que habla el mismo idioma y que siente un profundo afecto por Paraguay. Aquí se confía en que habrá hasta un guiño cómplice en los mensajes de Bergoglio en estos tres días de visitas que comienzan mañana.

“Es un gran hombre y lo queremos mucho”, definía un empleado de un hotel céntrico. Y en la definición dos grandes elementos: por argentino y por hispanoparlante se lo siente como uno más pero por su mensaje, su sencillez y el atrevimiento de Francisco para avanzar en definiciones dentro de la Iglesia, hay un cariño y una simpatía especial.

Paraguay, el cuarto país sudamericano que visita desde el inicio de su apostolado, será otro reto para evaluar su carisma.

Fuente: El Litoral, Santa Fe