Ganancias: Para los más altos, subirá el impuesto

La modificación de las escalas varía sensiblemente el peso del impuesto según el nivel de ingreso, mucho más que los cambios en el mínimo no imponible. El nuevo esquema de tasas favorece principalmente a trabajadores más cercanos al límite de pago del tributo.

La modificación de las escalas varía sensiblemente el peso del impuesto según el nivel de ingreso, mucho más que los cambios en el mínimo no imponible. El nuevo esquema de tasas favorece principalmente a trabajadores más cercanos al límite de pago del tributo.

Tomemos el caso de un trabajador que, en 2016, tuvo un sueldo bruto de 20 mil pesos hasta junio, y que en julio recibió un aumento del 30 por ciento y pasó a cobrar 26 mil pesos. Supongámoslo con esposa y dos hijos entre 18 y 21 años, y que los tres trabajan. Por lo tanto, no corresponde que haga las deducciones por carga familiar, aunque sea “casado con dos hijos” (categoría que en el impuesto no existe) y en cambio deba tributar como “soltero” (igualmente inexistente como definición para la ley). Aquel trabajador debió pagar por impuesto a las ganancias por el ejercicio anterior, aproximadamente, 4330 pesos (equivalente a 360 mensuales).

Si ese mismo trabajador mantiene ese mismo sueldo de 26 mil pesos hasta junio de 2017, pero a partir de julio recibe un aumento del 23 por ciento, a 32 mil de remuneración bruta, suponiendo además que paga un alquiler de 7500 pesos, por este próximo año debería pagar 530 pesos de impuesto. Es decir, el equivalente a 44 pesos mensuales, la octava parte que en el año anterior.

Veamos el caso de un trabajador en una situación de ingresos mucho más acomodada, propietario de su vivienda, con esposa que no necesita trabajar para aportar ingresos al hogar y dos hijos, entre 18 y 21 años, que tampoco trabajan. Supongamos que su salario era de 75 mil pesos en el primer semestre de 2016 y 97.500 en el segundo (con la misma hipótesis de aumento del 30 por ciento). En ese caso, podrá pagar por el ejercicio 235 mil pesos de impuesto, es decir casi 20 mil pesos mensuales, habiendo deducido la carga familiar por cónyuge e hijos. Si en 2017 mantuviera el mismo salario hasta junio, y luego recibiera un aumento del 23 por ciento (a 120 mil mensuales), el impuesto resultante  subiría a 293.700 pesos, manteniendo la deducción por cónyuge pero no por hijos, ya que la nueva ley bajará la edad límite de 24 a 18. Es decir, que por el año 2017 pagará un promedio mensual de casi 24.500 pesos, 25 por ciento más que el año anterior.

¿Qué cambió en el impuesto para que uno saliera beneficiado y el otro  no? Fundamentalmente, la escala del impuesto. Hasta 2016 cada escalón representaba un salto de 10 mil pesos (de ingresos brutos anuales, que son 866 por mes), pero en el nuevo esquema ese salto es de 20 mil anuales (1667 pesos mensuales) en los primeros tramos. Además, la nueva escala crea escalones intermedios para las alícuotas, con lo cual la tasa del impuesto también es menor. Para verlo más claramente, antes los tres primeros tramos de la escala eran así:

1) Ganancia imponible anual de 0 a 10 mil pesos: 9 por ciento de impuesto.

2) Ganancia imponible entre 10 y 20 mil pesos: impuesto de 900 pesos más el 14 por ciento sobre el monto que supere los 10 mil.

3) Ganancia imponible de 20 a 30 mil pesos: impuesto de 2300 pesos más el 19 por ciento sobre el excedente de 20 mil.

En el impuesto reformado, los primeros tres tramos quedan así:

1) Ganancia imponible de 0 a 20 mil pesos: 5 por ciento de impuesto.

2) Ganancia imponible de 20 a 40 mil pesos: 1000 pesos de impuesto más el 9 por ciento del excedente de 20 mil.

3) Ganancia imponible entre 40 y 60 mil pesos: 2800 pesos de impuesto más el 12 por ciento sobre el excedente de 40 mil pesos.

La disminución del impuesto para estos niveles de ingresos (60 mil pesos de ganancia imponible anual equivalen a un ingreso bruto mensual de más de 30 mil pesos) es visible. En cambio, para sueldos que superan ampliamente los topes máximos de la escala, los primeros tramos pierden relevancia.

En el ejemplo dado, el del trabajador con salarios elevados, en el segundo semestre de 2017 habrá pagado, por 2016, 28.500 pesos de impuesto fijo más el 35 por ciento sobre el excedente de 120 mil pesos de ganancia imponible anual: 206.500 pesos. Por el año 2017, pagaría 71.400 pesos de impuesto fijo más el 35 por ciento sobre el excedente de 320 mil pesos: 222.300 pesos de impuesto. Aunque aumentó sensiblemente el tope para ingresar a la tasa del 35 por ciento, y sus ingresos suban recién a mediados de año y en la misma proporción que el ajuste en las deducciones, igual el impuesto le resultará más alto.

Fuente: Página 12