Hay al menos 500 mil hectáreas bajo el agua en Córdoba
06/03/2015 CONTINGENCIASLa mayoría del personal de los campos fue evacuada, cerraron tambos y retiraron el ganado. Calculan millonesen pérdidas económicas. Piden declarar zona de desastre al nordeste cordobés.
Lo que hasta hace pocas semanas eran campos llenos de cultivos de soja hoy son extensas lagunas que se pierden en el infinito. Las últimas lluvias caídas la semana pasada provocaron que miles de hectáreas estén bajo agua y que los productores agropecuarios se movilicen para pedir que se declare “zona de desastre”.
El reclamo ya se escucha en el noreste cordobés, pero hoy seguramente se replicará en todas las zonas afectadas.
Un cálculo preliminar de la Bolsa de Cereales de Córdoba estimó que las inundaciones han afectado “entre 400 mil y 500 mil hectáreas de campos productivos”.
Pero no se descarta que el área afectada sea mayor si se tiene en cuenta que “en muchos lugares es imposible poder obtener información precisa, porque todavía se está en medio del punto más grave del tremendo fenómeno que se abatió sobre el área agrícola y ganadera del territorio cordobés”.
“Obviamente, las pérdidas que con seguridad se irán constatando en el sector impactarán sobre la economía general de la provincia y los habitantes de los pueblos y ciudades, sean estas pequeñas localidades rurales o grandes poblados”, agrega el reporte.
Panorama incierto
Al recorrer los campos, el panorama es desolador tanto en los que colindan con las rutas nacionales 19 y 158 como con la provincial 1.
La situación es crítica también para las áreas rurales. En el camino se observan establecimientos totalmente anegados y los caminos rurales se han convertido en caudalosos ríos, con tramos en los que se nota la falta mantenimiento.
A esto se le agrega el caudal de agua que ingresa de las bombas arroceras que se colocaron en la ciudad, que vuelcan sin control esos excedentes hídricos a los campos ya inundados.
Javier Casineri, presidente de la Sociedad Rural de San Francisco, aseguró que es una “catástrofe” la que están viviendo y que los daños son irreparables para el sector agropecuario, ganadero y lechero. “Llevará muchos años recuperarnos de esta inundación y muchos vamos a tener que cambiar de actividad”, indicó el ruralista, quien es propietario junto a su familia de una cabaña ganadera a pocos kilómetros al sur de San Francisco y uno de los afectados por las aguas. “La semana pasada tuve que evacuar al personal del campo y sacamos animales. Pero todavía no sabemos cuál será el panorama cuando volvamos”, aseguró.
El último paso del satélite por las zonas inundadas no produjo imágenes, debido a que el cielo estaba nublado y se espera obtener un informe esta semana para evaluar la dimensión del problema.
La Provincia recibe las declaraciones juradas de productores afectados, que serán incorporados a un decreto de emergencia agropecuaria que saldría la próxima semana.