Jubileo en Guaymallén: todos a planta permanente
Como un último gesto, rescindió contratos de profesores en centros deportivos, pero al personal municipal les dio su «jubileo».
Cumplan o no con los requisitos para estar efectivizados en la planta permanente del municipio, el concejal a cargo de la intendencia de Guaymallén, Luis Lobos, dejó a todo el mundo atornillado a su cargo. A pesar de que ninguna fuente municipal acepta hablar en público tras la derrota electoral sufrida hace casi un mes, en un hecho inédito, MDZ pudo saber que días después de las elecciones la Municipalidad dejó efectivos -como se dice en la jerga municipal- a los últimos 670 trabajadores que quedaban en planta temporaria. Esto habría surgido de un acuerdo con las diferentes fuerzas políticas que, también en silencio, avalaron el avance de Lobos sobre una decisión que no le tocaba ni a él ni a Marcelino Iglesias, su sucesor, sino que está establecido legalmente.
La noticia se conoció cuando una decena de empleados municipales adherentes al futuro gobierno municipal y, por lo tanto, disidentes del radicalismo que acuerda con Lobos en el Concejo Deliberante, renunciaron a su propia efectividad por no cumplir con los requisitos legales.
MDZ intentó hablar con el secretario de Gobierno, Juan Kohn, ante el repliegue total del concejal Lobos, pero se ofuscó notablemente al atender el celular que le provee la Municipalidad: A mí no me llamen; gestionen una entrevista con Prensa, bramó y derivó hacia el complejo de periodistas y encuestadores con que la actual gestión municipal rodeó al intendente interino. De todos modos, pudo saberse que dejará una planta de personal de unas 4.100 personas. Godoy Cruz funciona con unos 1.500.
El intendente electo, Marcelino Iglesias, no ha interactuado con Lobos, ni lo hará, según dijo a MDZ. Por lo que transición de un gobierno a otro se está tornando en una grave crisis con una herencia imposible de conocer de cuerpo entero hasta tanto los nuevos funcionarios hagan pie en el municipio.
