La Haya se declaró competente para tratar el conflicto Chile-Bolivia
25/09/2015 EL MUNDO
El gobierno de Evo Morales presentó en abril de 2013 una demanda que obligara a Chile a negociar de buena fe el pedido de una salida al mar, perdida en 1879 en la Guerra del Pacífico.
Desestimando la objeción preliminar presentada por el equipo chileno, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya se declaró ayer competente para tratar la demanda de Bolivia contra Chile para lograr un acceso al océano Pacífico.
El evento, durante el cual 14 de 16 jueces votaron que la CIJ tiene competencia para abordar la demanda marítima, fue seguido en La Paz y Santiago por los presidentes Evo Morales y Michelle Bachelet, ambos acompañados de sus ministros.
Bolivia presentó en abril de 2013 una demanda para que la CIJ obligara a Chile a negociar de buena fe el pedido boliviano de una salida al mar, perdida en 1879 en la Guerra del Pacífico, que involucró también a Perú.
Chile cuestionó la competencia del tribunal basándose en el Tratado de Paz y Amistad firmado por los dos países y en el artículo sexto del Pacto de Bogotá, que ratificó diferendos o asuntos resueltos antes de 1948. No obstante, la CIJ rechazó el principal argumento chileno de que las cuestiones de límites ya estaban definidas en el Tratado de Paz de 1904, desestimó la objeción de ese país y admitió que la demanda boliviana proseguirá cumpliendo todos los pasos jurídicos hasta su resolución, lo que podría durar otros cuatro años más.
Evo pide diálogo con Michelle Bachelet
Tras la decisión de La Haya, Evo Morales hizo un llamado al gobierno de su homóloga chilena, Michelle Bachelet, a dialogar bilateralmente sobre la demanda marítima de su país.
«Convoco a un diálogo para resolver la demanda en vez de que seamos juzgados por organismos internacionales o tribunales creados por la humanidad mediante las Naciones Unidas», ofreció Morales a Bachelet.
Morales calificó al fallo como «histórico» y agradeció el apoyo de los organismos internacionales, de los movimientos sociales del mundo, y «últimamente» el apoyo del Papa Francisco, que expresó su solidaridad «al visitarnos» en julio pasado. En cambio, la socialdemócrata Bachelet aseguró, que Bolivia «no ha ganado nada» con el fallo de la CIJ.
La Corte ahora iniciará un proceso que demandará por lo menos cuatro años resolverla.