La Muni de Neuquén inauguró 30 hectáreas de espacios verdes durante la pandemia
Desde que arrancó la cuarentena, Neuquén sumó 54 nuevos espacios y kilómetros de bicisenda.
13/09/2021 MUNICIPIOSDesde que arrancó la cuarentena, Neuquén sumó 54 nuevos espacios y kilómetros de bicisenda.
La pandemia modificó hábitos y la ciudad de Neuquén “se amoldó ante las nuevas necesidades de sus vecinos”. El distanciamiento social y la actividad física fueron fundamentales para esta cuarentena en la que se inauguraron 30 hectáreas de espacios verdes.
“En realidad la pandemia potenció y aceleró los proyectos que ya teníamos en la ciudad”, aseguró a LM Neuquén Santiago Morán, secretario de movilidad y servicio urbano que planteó que el desarrollo urbano es uno de los temas de agenda que tiene la gestión del intendente actual, Mariano Gaido.
Desde que la cuarentena se decretó a nivel nacional, el 20 de marzo del 2020, la Municipalidad construyó e inauguró 19 espacios verdes nuevos. “Los hicimos de cero y fueron un total de 15 hectáreas en las que desarrollamos una plaza o un parque donde antes había un baldío. Además, renovamos otros 35 espacios que estaban en desarrollo. O bien estaban en estado de abandono o estaban sin terminar y los dejamos como nuevos. Eso equivale a otras 15 hectáreas más”, explicó.
Para Morán la pandemia y el contexto de encierro que generó la cuarentana, produjo que los vecinos valoren más los espacios públicos. “Nosotros no paramos en ningún momento, pero muchos de los sectores sí. Eso nos permitió trabajar con tranquilidad y más rápido. Más allá de que también nos tuvimos que organizar, hacer traslados, respetar todos los protocolos y, también, tuvimos inconvenientes, claro. Pero la ventaja de no tener una sola locación de trabajo, estar al aire libre y de que el ritmo de la calle baje, nos permitió hacer todo lo que hicimos”, aseguró.
La fecha que suele poner la secretaría para inaugurar las obras es el aniversario de la ciudad. Para el 2020 además de otros parques y plazas, uno de los más importantes fue el Jaime de Nevares, en el que en 5 hectáreas pusieron “toda la carne al asado”. “Lo hicimos en tiempo récord. Lo pudimos desarrollar en solo tres meses y nos lo permitió la pandemia porque no había gente circulando. Y hay que tener en cuenta de que ese lugar, en un principio, estaba destinado al desarrollo inmobiliario y nosotros lo convertimos en lo que es hoy. Un parque completo, con cancha de fútbol tenis, que es un deporte que tiene cierta distancia social y no son convocantes. Además de la cantidad de plantas y árboles que pusimos dentro, que cuando crezcan harán la diferencia”, describió.
Cuando llegaron a la gestión, notaron un “gran desequilibrio urbanístico”, en el que había mucho desarrollo en el centro y en la costa del río, pero el resto de la ciudad “estaba descuidada”. Por eso, “una de las bases” que se propusieron fue acercar el espacio verde a los vecinos y que “no tenga la obligación de ir sí o sí al río para salir a caminar o ir a pasar la tarde”. “Lo que nosotros hicimos fue generarle al vecino espacios de recreación cerca de cada uno de los domicilios. Y en la pandemia muchos se dieron cuenta lo necesario qué son los lugares a donde pudimos salir al aire libre de este encierro que fue fuerte. Y una vez que se empezó a flexibilizar y estos lugares se llenaron”, explicó Morán.
Ante esa planificación y las respectivas obras que se llevaron a cabo, “los vecinos tienen una participación presente”. “Desde el momento en que se pone el cartel de que un espacio está en construcción, se les nota felices. Porque no solo ganamos un espacio verde en la ciudad, sino que uno seguro. Muchos habían sido baldíos oscuros y sin atención y eso es lo que también valorar”, apuntó y ejemplificó: “Eso pasó cuando hicimos el parque lineal Unión de Mayo, cerca del Ruca Che, que va de la calle Rufino Ortega y Moritán. Era un descampado donde se dejaban vehículos abandonados y desarrollamos un parque con toda esta propuesta. Metimos cisterna para que el agua alcance y revalorizamos un espacio casi abandonado”.
Cuando Morán se acerca a los barrios y charla con los vecinos, les pide que “se apropien” del espacio. “Eso hará que lo cuiden y que todo esté cuidado. La ciudad está creciendo y nuestros vecinos son parte importante del crecimiento”, agregó.
Por su parte, la pandemia también cambió el uso de los medios de transporte. Durante más de un año, el colectivo estuvo limitado en su capacidad y la bicicleta tomó relevancia en el día a día de los neuquinos. “Cuando llegamos en diciembre teníamos solo 24 kilómetros de bicisenda que no estaban conectados entre sí. Hoy tenemos 60 km y empezamos a conectarla y comenzamos a ver que el uso era fundamental y nosotros lo tenemos como una prioridad”, planteó, tras asegurar los beneficios: “La bicicleta es lo mejor, es el objetivo que tenemos por cuestiones ecológicas, sustentables, que hacen bien a la salud, que te permite mantener distanciamiento social. Además, son económicas”.
La ciudad de Neuquén tiene 1060 espacios verdes declarados, pero solo 400 están desarrollados, 300 tienen medio desarrollo, “que es cuando una plaza tiene algún tobogán o un solo banco” y los otros 360 son baldíos. Están declarados catastralmente, pero hay solo yuyos.
“El objetivo es continuar convirtiendo esos baldíos en espacios seguros y, por sobre todo, espacios verdes para que el vecino pueda usarlos. Estamos llevando a cabo obras o refacciones en todos los barrios de Neuquén y seguimos avanzando en esta ciudad en la que tanto creemos y tanto está creciendo”, concluyó Santiago Morán.