«La pandemia ha desnudado los fundamentos mezquinos sobre los que se construyó el orden económico dominante»
En su saludo con motivo de la Pascua, el Grupo de Curas en la Opción por los Pobres (COPP) expresó su agradecimiento "a las autoridades de todos los niveles y colores políticos que se han avocado contra viento y marea a trabajar juntos al servicio de la vida
13/04/2020 El PaísEn su saludo con motivo de la Pascua, el Grupo de Curas en la Opción por los Pobres (COPP) expresó su agradecimiento «a las autoridades de todos los niveles y colores políticos que se han avocado contra viento y marea a trabajar juntos al servicio de la vida, a las y los trabajadores de la salud que ponen su vida en riesgo para atender a los enfermos, a quienes desempeñan tareas, muchas veces en situaciones de riesgo, sin las cuales la sociedad dejaría de funcionar, a todos y todas las que salen a la calle cada día para garantizar que podamos cumplir con este aislamiento de la mejor manera posible». Todo ello, dicen, porque estas personas «son hoy, creemos, una cara visible de Jesús resucitado».
Los sacerdotes que trabajan en medios populares dicen también en su mensaje que «no nos cabe duda de que esta pandemia ha desnudado los fundamentos mezquinos sobre los que se construyó el orden económico dominante hasta ahora: el neoliberalismo ha demostrado su desprecio por la vida». Consideran que quienes han defendido estas posiciones «en su afán de lucro y poder han creado las condiciones para la rápida extensión de la pandemia» y «son los que hoy pretenden salir indemnes de ella, sin poner en juego un centavo de sus ganancias, aunque mueran cientos de miles de seres humanos para ello (por supuesto, los más vulnerables)».
Reconociendo que la pandemia que enfrentamos se presenta como «una amenaza a la vida» y que «el aislamiento social al que nos sometemos es el único camino para salvar vidas» no obstante «nos hace sentir que nos falta el abrazo de los que queremos, el que nos hace sentir acompañados y cobijados».
La coyuntura, dicen, ha permitido también revelar «la calidad humana de quienes se juegan la vida para atender la salud y las necesidades básicas de nuestra sociedad, que de nosotros puede salir algo mejor». Y todo ello, agregan, demuestra que «es posible vivir de otra manera», dado que «los gestos de solidaridad que se multiplican y nos muestran que no todo está perdido».
Acerca del «día después», el documento emitido por el Secretariado de los COPP se pregunta «¿Quiénes serán determinantes para dar forma al “día después”?, ¿los que ponen la política y la economía al servicio de la vida o los que querrán seguir poniendo la vida (las vidas concretas) a disposición del lucro y el poder?».
«Si queremos salir mejores de esta pandemia, si queremos una humanidad para la cual la vida de todos y todas, la vida de cada una y cada uno sea invalorable, sólo podemos hacerlo gestando sociedades que se organicen desde el «partir el pan»», dicen los sacerdotes católicos. Y subrayan que «desde el pan compartido y para compartir el pan debemos darle forma a lo que viene. Cada uno desde su lugar».
Afirman también los curas que «creemos que en nuestro país, particularmente, se han hecho opciones que apuntan a servir la vida», aunque «no falta la miseria de quienes quieren volver a construir desde el egoísmo y la mezquindad, de quienes manifiestan todavía el desprecio por la vida de los más pobres, nos alienta que la gran mayoría de quienes habitan este suelo bendito entienden y aceptan que de esta crisis sólo se sale priorizando y sirviendo a la vida».