«La pandemia nos enseña que vivimos en un país injusto»

Alberto Fernández dijo que el desafío es diseñar una Argentina igualitaria cuando pase la emergencia sanitaria por el coronavirus.

Alberto Fernández dijo que el desafío es diseñar una Argentina igualitaria cuando pase la emergencia sanitaria por el coronavirus.

El presidente Alberto Fernández sostuvo ayer que «lo primero que debe enseñarnos la pandemia es que vivimos en un país injusto», ya que la emergencia sanitaria por el coronavirus dejó «al descubierto la desigualdad en la que vivimos» en Argentina,

Al participar de un acto en la Casa de Gobierno bonaerense, donde se anunció un plan de obras públicas para municipios del conurbano, el mandatario planteó que «el verdadero desafío que deja la pandemia» es la necesidad de «diseñar un país igualitario, con criterio de igualdad».

En ese marco, el presidente se refirió a las desigualdades sociales que existen en el país e hizo foco en el barrio Villa Azul, que se encuentra ubicado entre el municipio bonaerense de Quilmes y Avellaneda, y que fue totalmente aislado por la gran cantidad de contagios de coronavirus que se registraron en los últimos días.

«De un lado del Barrio Azul hay condiciones de dignidad. Cruzando la calle, ese desarrollo no se hizo. Ahí están las dos Argentinas», remarcó el mandatario, acompañado por el gobernador bonaerense Axel Kicillof; el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; y el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis.

Tras anunciar la puesta en marcha del Fondo de Infraestructura Municipal en esa provincia, el presidente fue contundente al aseverar que «lo primero que debe enseñarnos la pandemia es que vivimos en un país injusto y ahora nadie puede decir que no lo vio».

En esa línea, aseguró que el coronavirus deja «al descubierto la desigualdad en la que vivimos porque en este país había millones de personas a los que el Estado no tenía registrado».

Ante la presencia de varios intendentes bonaerenses de diferentes partidos políticos, Fernández habló de la necesidad de «diseñar un país igualitario, con criterio de igualdad» y planteó que ese «es el verdadero desafío que deja la pandemia».

Unidades carcelarias

Por otro lado, Fernández aseguró que «los desafíos no son la mano dura o la mano blanda» porque «poner mano dura, meter gente presa pero no construir cárceles, no tiene sentido, es solo marketing» y advirtió que mantener a esas personas hacinadas es un «acto inhumano», durante un acto en el que el Ministerio de Obras Públicas anunció la construcción de 12 Unidades Sanitarias Carcelarias en penales de la provincia de Buenos Aires, en el contexto de la pandemia de coronavirus.

«Los desafíos no son la mano dura o la mano blanda. Poner mano dura, meter gente presa pero no construir cárceles no tiene sentido, es solo marketing. Tener a esas personas hacinadas es un acto inhumano. Y nosotros abrazamos la política porque la humanidad nos importa», señaló el jefe del Estado.

El gobernador Axel Kicillof también destacó el apoyo del gobierno nacional para ampliar la infraestructura de las cárceles de la provincia.

«Se habló mucho de la cuestión penitenciaria. Lo que hizo Nación es muy importante porque harán 12 centros de salud en las cárceles, con plazas para aislamiento de internos. Nosotros haremos 2000 nuevas plazas en el Servicio Penitenciario Bonaerense», precisó.

En tanto, Katopodis dijo que «se destinarán 800 millones de pesos al desarrollo de las unidades, realizadas por directivas del Ministerio de Salud en un trabajo conjunto con las carteras de Justicia de la Nación y de la provincia».

Asimismo, informó que la contratación, construcción y equipamiento de los espacios se gestiona a través de las Naciones Unidas, «que garantiza rapidez, transparencia y eficacia por su experiencia y buenas prácticas internacionales».

«El proceso de licitación lleva 15 o 20 días y, una vez finalizado, empieza la obra», dijo el ministro.

Según los datos difundidos por el Ministerio, las unidades sanitarias, de 365 metros cuadrados, estarán ubicadas en terrenos dentro de los penales y cada una permitirá sumar 24 lugares con celdas individuales, con cierre electrónico y un sistema de monitoreo. Los módulos son para construcción en seco y pueden ser ampliados con facilidad en caso de ser necesario, además tendrán equipamiento de Rayos X móviles, resucitador, equipo de traqueotomía, respirador, kit de laboratorio y equipo de curaciones, indicó Katopodis.

Las unidades también tendrán un sistema de cámaras de monitoreo y permanecerán como centros de salud en los penales cuando se termine la pandemia.

Fuente: La Capital