La pobreza multidimensional en Río Cuarto es del 54%
El dato surge de un informe elaborado por el Centro Coordinador de Estadísticas Regionales del Consejo Económico y Social. Toma Vivienda, Hábitat, Salud, Empleo, Educación y Estrategias del hogar, a diferencia del Indec, que lo hace sólo por ingresos
El dato surge de un informe elaborado por el Centro Coordinador de Estadísticas Regionales del Consejo Económico y Social. Toma Vivienda, Hábitat, Salud, Empleo, Educación y Estrategias del hogar, a diferencia del Indec, que lo hace sólo por ingresos
La pobreza multidimensional de Río Cuarto alcanza el 54,3%, según un informe elaborado por el Centro Coordinador Regional de Estadísticas (Cecre) del Consejo Económico y Social que toma aspectos como Vivienda, Hábitat, Salud, Empleo, Educación y Estrategias del hogar, a diferencia del parámetro del Indec, que elabora el indicador sólo a partir de los ingresos de la población y su comparación con el valor de la canasta.
El trabajo explica que “el Indicador de Pobreza Multidimensional (IPM) permite medir la pobreza considerando múltiples dimensiones, a diferencia de los indicadores tradicionales, que se centran únicamente en el ingreso”.
En este punto, y considerando ambas metodologías de medición de pobreza, el informe remarca que “el IPM histórico muestra una disminución en los últimos 20 años (lo que implica una mejora en ese período). Sin embargo, la situación económica en Argentina, representada por los ingresos (método tradicional de medición de la pobreza), no refleja la misma tendencia. Por otro lado, los indicadores empleados para evaluar la pobreza desde una perspectiva multidimensional indican una mejora en las necesidades básicas durante este período. A pesar de ello, el IPM sigue siendo superior al 50%”, aclara. Claramente, ambas mediciones no concuerdan generalmente.
Por eso, el trabajo del Centro Coordinador Regional de Estadísticas remarca que, “si se mide la pobreza monetaria de los hogares según las dimensiones en las que presentan vulnerabilidad, se observa que el 7,4% de los hogares que no son pobres multidimensionalmente (cero dimensiones) sí son pobres por ingresos. En el otro extremo, de los hogares que tienen vulneradas las cinco dimensiones, el 79,2% también presenta pobreza por ingresos”.
Diferencias de criterio
Abundando en la comparación de ambas metodologías, se aclara que “la dificultad de esta medición radica en el alto porcentaje de personas que no responden a las preguntas sobre sus ingresos. En cambio, la medición multidimensional utiliza métodos alternativos que permiten estimar la pobreza incluso sin esta información”.
Para elaborar el Índice se toma, por ejemplo, dentro de la dimensión Vivienda, las características del piso, del techo, hacinamiento, tenencia insegura (sin permiso o propietario de la casa pero no del terreno) y la ubicación de su vivienda.
Es el porcentaje de hogares que, teniendo vulneradas 5 dimensiones, son considerados pobres por ingresos también.
Para Educación se considera la inasistencia y deserción escolar, secundario incompleto y rezago escolar.
En materia de dimensiones, el trabajo destaca que, aunque las metodologías actuales emplean dimensiones fundamentadas en el enfoque de derechos, la realidad de la ciudad de Río Cuarto muestra que varios de esos umbrales ya están resueltos y presenta particularidades que exceden este marco. Por esta razón, se ha incluido la sexta dimensión, de Estrategias del hogar, destinada a representar los mecanismos de subsistencia adoptados por los hogares en la actualidad.
