La Provincia de Córdoba también advierte un “claro aumento” de la demanda social

El delegado del Ministerio de Desarrollo Social, Roberto Aguilera, sostuvo que crecieron los pedidos de ayuda que llegan al Centro Cívico. Además, dijo que tuvieron que reforzar partidas para dar respuestas

El delegado del Ministerio de Desarrollo Social, Roberto Aguilera, sostuvo que crecieron los pedidos de ayuda que llegan al Centro Cívico. Además, dijo que tuvieron que reforzar partidas para dar respuestas

Después de que la Universidad Católica Argentina (UCA) revelara que casi el 60 por ciento de los niños del país viven en la pobreza, también la Provincia advirtió que esos números tienen un correlato directo con la realidad que les llega a diario. En este sentido, el delegado del Ministerio de Desarrollo Social, Roberto Aguilera, sostuvo que hay un “claro aumento” en la demanda de asistencia, como consecuencia de la crisis económica.

“El aumento de la demanda social se percibe claramente, tanto en la gente que llega hasta el Centro Cívico como cuando nosotros vamos a visitar a las familias a los barrios”, señaló el funcionario provincial.

En el mismo sentido, señaló que hubo un crecimiento “muy patente” de la demanda social en los últimos dos años.

“Las devaluaciones y la inflación siempre traen aparejado un aumento de la problemática social. Los efectos se ven siempre con el tiempo, y eso es lo que pasa ahora”, amplió el delegado de la cartera social en el Centro Cívico.

Si bien indicó que aún no tienen cuantificado ese incremento en los pedidos de ayuda, se remitió a un ejemplo concreto.

En tal sentido, explicó que debieron tomar previsiones y reforzar algunas partidas. Sin ir más lejos, triplicaron la entrega de ladrillos para la construcción, un tipo de asistencia que se les da a las familias con problemas de hacinamiento y sin techo.

“Antes de que se agravara la situación, les hacíamos entregas de 30 bolsas de cemento a los internos de la cárcel, que fabrican los ladrillos block. Pero ahora les entregamos partidas de 90”, graficó el funcionario.

“Notamos que se complicó más la situación en el contacto con las familias, con las madres, cuando vienen a buscar dinero para poder hacer una habitación, o porque vienen a buscar un subsidio. Además, lo notamos cuando salimos a los barrios”, agregó Aguilera.

¿Se nota también la realidad de los chicos bajo la línea de pobreza?
Hay gente que no tiene alternativa. Y lo que más debiera preocuparnos es que estamos hablando de más del 50 por ciento de los niños, a los que se les achican mucho las posibilidades de futuro. Porque si hoy no pueden ir a la escuela o si no cuentan con los alimentos que necesitan para desarrollarse, no es muy difícil advertir que van a sufrir las consecuencias.

¿Dan abasto con toda la demanda de asistencia que reciben?
Intentamos hacer todo lo posible para ayudar a la gente, pero también tenemos que aguzar mucho el ingenio. También buscamos que la gente nos ayude con ideas y proyectos para ayudar al que lo necesita. Hasta ahora no tenemos faltante de comida ni de otros insumos.

Según reveló esta semana la UCA, el 58,7% de los menores de 18 años son pobres, lo que representa unos 7,6 millones de niños y adolescentes con carencias estructurales, reveló ayer el último informe del Barómetro de la Deuda Social de la Infancia que realiza la mencionada Universidad.

Asimismo, la investigación determinó que seis de cada diez niños en la Argentina urbana sufrían a fines del año pasado carencias por lo menos en una de las seis dimensiones bajo estudio: derechos a la alimentación, a condiciones de saneamiento adecuadas, a una vivienda digna, a la atención de la salud, a la educación y la estimulación temprana, y al acceso a la información.

Fuente: Puntal