Las cooperativas cordobesas, “entre la quiebra y las puebladas” por las tarifas de la luz

Más de 200 cooperativas eléctricas proveen de energía al 70 por ciento del territorio provincial, donde se consume sólo el 30 por ciento de la electricidad.

Más de 200 cooperativas eléctricas proveen de energía al 70 por ciento del territorio provincial, donde se consume sólo el 30 por ciento de la electricidad. En esas ciudades pequeñas, pueblos y parajes, las boletas de la luz no paran de subir la tensión social y en pocas semanas se sucedieron manifestaciones y protestas en Río Tercero, en Villa Dolores, en Colonia Tirolesa, en Jesús María, en Deán Funes, en Quilino, en San José de la Dormida y en Arroyito.

A tono con el clima de pueblada que exhiben sus asociados, en las cooperativas crece el malestar. “La situación es de norme preocupación porque nos hacen cargo de un aumento brutal del que las cooperativas no somos responsables. Hoy nos encontramos entre la pueblada de nuestros socios y la quiebra, porque de ninguna manera podemos absorber esas subas”, indicó Luis Castillo, presidente de la Federación de Cooperativas Eléctricas de Córdoba (Colsecor).

Esa entidad y la Federación Argentina de Cooperativas Eléctricas (Face) nuclean a todas las cooperativas cordobesas, que hoy definirán las acciones por seguir ante las resoluciones del Ente Regulador de Servicios Públicos (Ersep), el anuncio de un nuevo marco regulatorio de la energía por parte de la Provincia y varias demandas que no encuentran eco desde hace tiempo, en especial la implementación en el interior de la tarifa social que amortigua el impacto de las subas de la energía entre los usuarios más pobres de la Capital y las otras grandes ciudades servidas por Epec (parte del Gran Córdoba, Villa María, Río Cuarto y San Francisco).

“El detonante principal de esta situación fue la quita de los subsidios nacionales. Pero además Epec nos vende la energía más cara a las cooperativas, más del 40 por ciento de las facturas son impuestos y no tenemos ninguna herramienta para dar respuesta a la población más pobre. La implementación de la tarifa social en el interior provincial es un reclamo concreto y urgente”, indicó Castillo.

El dirigente reiteró que el reclamo de los usuarios del interior “es legítimo”, pero aseguró que lo que las cooperativas pueden hacer para morigerar las subas es muy poco.

Puso el ejemplo de Colonia Tirolesa: “Se trata de una cooperativa muy eficiente, que vende casi al mismo costo que Epec. El año pasado resolvió absorber tres aumentos de tarifa y este año la situación se le hizo insostenible y tuvo que trasladarlos a la tarifa. Se vivió una pueblada. Volvió atrás en la aplicación de los aumentos y recurrió a crédito bancario para cubrir la diferencia, una salida de muy corta vida que preanuncia una situación de quiebra. Esa es la situación a la que se encaminan todas las cooperativas si seguimos en este rumbo”, indicó Castillo.

Remarcó que esta situación de tensión social se manifiesta en el interior, cuando todavía falta la aplicación de dos tramos de la quita de subsidios, que este año generará aumentos de la energía de entre 30 y 50 por ciento.

Tanto Fecescor como Face respaldarán la propuesta que anticipó el Gobierno provincial para un nuevo marco regulatorio de la energía. Consideran que la fijación de una tarifa única para el transporte de la energía atiende un pedido histórico del sector cooperativo, y que el fondo compensador anunciado permitirá atender a las zonas de mayores costos operativos y menor población, todas en manos de cooperativas.

Respecto de la decisión del Ersep que obliga a las cooperativas a facturar la energía y el agua potable de modo independiente de todos los demás servicios que ofrecen, Castillo recalcó que no es una medida que complique a las cooperativas, sino a los usuarios.

Sobre la morigeración de tasas municipales en las facturas, consideró que la medida es razonable, pero que debe complementarse con la quita de otras cargas impositivas, tanto nacionales como provinciales, incluyendo los anticipos de Ingresos Brutos que aplica la Provincia sobre la luz.

Fuente: La Voz