Los peones rurales siguen con los peores ingresos

Hasta septiembre, la remuneración del sector era de 8.531 pesos en Salta.

Hasta septiembre, la remuneración del sector era de 8.531 pesos en Salta.

La situación de los empleados del campo sigue siendo la más crítica, según los datos oficiales y la información suministrada por la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre).

Según el Ministerio de Trabajo, el sector agrícola en Salta tenía una remuneración promedio de 8.531 pesos en septiembre. Son los últimos datos disponibles. Se contabilizaron más de 18 mil trabajadores.

Desde la Uatre precisaron que, en septiembre, un peón general tenía una remuneración de 9.215 pesos. El horizonte no es promisorio. Desde octubre de 2016 hasta septiembre de 2017 cobrará 10.368 pesos, un monto que no cubre la canasta de pobreza.

El tractorista contará con un haber de 11.548 pesos en ese lapso, y el capataz unos 12.608 pesos. Estos valores, indicaron desde el gremio, pueden variar si se vuelven a reunir para discutir las remuneraciones.

PALIATIVO
En diciembre se conoció que los trabajadores rurales recibirían un bono de fin de año de 2.000 pesos que debían pagar las empresas agropecuarias, con excepción de los tambos.

El bono se cobró con la liquidación de diciembre y buscaba disminuir en algo el impacto de la inflación sobre los salarios del sector, que se encuentran entre los más bajos de la economía nacional.

La medida fue dispuesta por la resolución 205/16 de la Comisión Nacional de Trabajo Agrario y comprendía a peones, puesteros, capataces, encargados y conductores, operadores y mecánicos de máquinas agrícolas.

LA SITUACIÓN DE LOS MAESTROS
Los docente privados que tienen un solo empleo quedan con ingresos mensuales por debajo de la línea de pobreza que marca el Indec en Salta.

Mario Palavecino, secretario general del gremio Sadop, que nuclea a esos educadores, sostuvo que un docente que recién se inicia debe vivir con un ingreso cercano a los 9.500 pesos.

Ese monto incluye el incentivo docente, los aportes de la ley de financiamiento educativo y decretos provinciales que varían según la antigedad del trabajador.

«Obviamente no llegamos a cubrir la canasta de pobreza, pero lo que hay que saber es que eso es por un turno», agregó Palavecino.

El sindicalista mostró preocupación por la posibilidad de que este año no se fije un piso salarial a nivel nacional.

«Cada provincia deberá pelear un aumento. Nosotros como sindicato no vamos a cerrar nada que sea anual. Iremos analizando los rumbos económicos», agregó.

Al ser consultado sobre el empleo informal en el sector, dijo que desde hace años se viene trabajando en el tema y que no es significativo el número.

No obstante, se refirió a los «profesores taxis». «Ellos hacen tres horas en un colegio y otras tres en otros. Esto también ocurre en la parte pública. Son contados con los dedos de la mano los que están en otra situación», afirmó Palavecino.

Fuente: El tribuno Salta