Los suizos rechazaron reformar el sistema de jubilaciones a los 65 años
Los suizos dieron ayer un duro golpe al Gobierno al rechazar en referéndum reformar por primera vez en veinte años el sistema de pensiones, mientras apoyaron claramente garantizar en la Constitución la seguridad alimentaria.
25/09/2017 EL MUNDOLos suizos dieron ayer un duro golpe al Gobierno al rechazar en referéndum reformar por primera vez en veinte años el sistema de pensiones, mientras apoyaron claramente garantizar en la Constitución la seguridad alimentaria.
El 52,7 por ciento de la población dijo «no» a la propuesta del Gobierno, respaldada por una mayoría parlamentaria, de reforma de las pensiones, informó el organismo electoral.
Una mayoría de los cantones votó en contra de la financiación adicional al Seguro estatal de Vejez. Las pensiones en Suiza se basan principalmente en el Seguro de Vejez y en la previsión profesional, ambos obligatorios, y en un tercer pilar que es opcional y privado.
La reforma habría supuesto elevar progresivamente la edad de jubilación de las mujeres de 64 a 65 años, equiparándola a la de los hombres, y la introducción de un sistema de jubilación flexible para las personas entre 62 y 70 años. Como medida de compensación, y sólo para los nuevos jubilados, la pensión habría aumentado en 70 francos (60,40 euros) por mes. La pensión media de las mujeres suizas ronda los 2.000 francos.
Para mejorar la financiación del Seguro de Vejez se habría aumentado ligeramente el IVA destinado a esta partida y, en las previsiones profesionales, se habría reducido la tasa de conversión del capital ahorrado en la renta y aumentado la cotización. Para el Gobierno era «urgente» una reforma porque las personas nacidas en las décadas de 1950 y 1960, los «baby-boomers», se jubilarán en los próximos años, lo que someterá a presión a las finanzas del sistema de pensiones.
A ello se suman unas tasas de interés muy bajas, unas cuentas desequilibradas y que las pensiones se pagan cada vez durante más tiempo ante el aumento de la esperanza de vida. La derecha, los sindicatos y algunos sectores de la izquierda sostenían que el aumento de la edad de jubilación de las mujeres y el incremento del IVA y de la cotización suponían un precio demasiado alto a pagar por los trabajadores, teniendo en cuenta además la constante subida de los seguros de salud.
También afirmaban que las mujeres a menudo tienen sueldos más bajos que los hombres y que el aumento de su edad de jubilación allanaría el camino para una jubilación a los 67 años para todos. Además alegaban que la reforma era demasiada generosa con los nuevos jubilados en detrimento de los actuales y los jóvenes y que no garantizaba el mantenimiento del nivel de las rentas.
En cambio, el pueblo suizo sí ha adoptado en referéndum con el 78,7 por ciento de los votos una enmienda constitucional para garantizar la seguridad alimentaria a través de toda la cadena agroalimentaria y con productos tanto nacionales como importados.