Una decena de empleados del Centro de Documentación Rápida de Olavarría madrugaron con la noticia de que habían sido despedidos. Indignados, tomaron las instalaciones de la repartición.
Diez de los doce empleados del Centro de Documentación Rápida de Olavarría recibieron hoy telegramas de despido. Indignados, tomaron la repartición y salieron a denunciar la situación y aclararon que no son “ñoquis”.
Se trata, en rigor, de la rescisión de diez contratos, decidida por el Registro Nacional de las Personas. La decisión fue repudiada por la dirigencia peronista de Olavarría que se acercó al local para solidarizarse con los despedidos y habría una marcha esta misma tarde.
Por su parte, los trabajadores del CDR resolvieron “tomar” las instalaciones. “Oficina tomada por despidos injustificados”, rezan los carteles que colgaron en los ingresos.