Mendoza: Irrigación y el trabajo «invisible» que suma áreas cultivables y mueve casi $1.000 millones
Desde el Departamento General de Irrigación detallaron los diversos destinos a los que llegan los $986 millones presupuestados para inversión durante 2022. La meta es resguardar el bien más preciado para los mendocinos: el agua
Desde el Departamento General de Irrigación detallaron los diversos destinos a los que llegan los $986 millones presupuestados para inversión durante 2022. La meta es resguardar el bien más preciado para los mendocinos: el agua.
En las últimas semanas, el Departamento General de Irrigación difundió el estado de distintas obras en los departamentos mendocinos, como parte de un plan anual que tiene un presupuesto de $986 millones y cuenta entre sus metas principales evitar que el agua -el bien más preciado de la provincia- no se pierda en su trayecto por los cauces.
Se trata, según precisaron fuentes oficiales, de más de 50 proyectos que incluyen el cuidado de los reservorios, la impermeabilización de canales, el entubado y el mantenimiento de diques.
Tarea fundamental, porque la cadena de la eficiencia hídrica es tan fuerte como lo sea su eslabón más débil: es decir que si la red de distribución es buena pero hay un solo tramo defectuoso -por pérdidas, filtraciones, etcétera- el efecto sobre todo el sistema es demoledor.
Irrigación y la obra pública para cuidar el agua
Los trabajos que destacaron recientemente desde Irrigación pasan por todos los puntos cardinales del territorio mendocino. Por supuesto que falta mucho aún, pero una enumeración somera de lo que se inició en 2022 permite dimensionar la magnitud del desafío.
En la cuenca del río Mendoza se están llevando a cabo obras que permiten la impermeabilización de 3.700 metros de cauces en el Gran Mendoza, con una inversión de $190 millones.
En la cuenca del río Diamante, en San Rafael, se ejecutan 18 proyectos hídricos sobre las redes primarias, secundarias y terciarias. Son casi nueve kilómetros de cauces impermeabilizados y la inversión asciende a $143,4 millones. Para tener una perspectiva que a veces resulta difícil de adquirir desde la Ciudad: sólo con las obras en la red terciaria, que mejorarán la distribución, se beneficia una superficie de 3.725 hectáreas, alcanzando a 2.061 usuarios.
En Malargüe, el revestimiento del canal matriz Cañada Colorada recibió una inversión de $38,5 millones y contribuirá a que se filtre menos líquido a lo largo el trayecto. Ya se impermeabilizaron 992 metros.
En el Tunuyán inferior hay una serie de 15 obras que, en total, implican $144,5 millones de pesos. Serán 4.180 metros de canales impermeabilizados los que sumará esta zona, que tiene un marcado perfil productivo.
Otro ejemplo: en La Consulta (San Carlos), sobre la cuenca del río Tunuyán superior, se revistió el canal rama centro con una inversión de $19 millones. Es un avance puntual dentro de una movida más amplia. En esa parte y los alrededores, de hecho, se está llevando a cabo la modernización de la red de distribución con 9 obras y una inversión total de $111 millones. Cuando finalicen esas tareas, serán 5.365 los metros de cauces impermeabilizados.
En General Alvear, se trabaja desde principios de agosto en la impermeabilización del fondo del canal A, en San Pedro del Atuel, a lo largo de casi dos kilómetros. El siguiente video permite ver cómo se mejora un canal de tierra, sobre el que se coloca una membrana de polietileno que en este caso aportó el municipio alvearense. Con eso se logra reducir las pérdidas.
Fuente: Uno
